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Luisaelena Echarry Rojas de 36 años, fue asesinada por su pareja en el interior de su vivienda ubicada en Parque Caiza, parroquia Caucaguita, municipio Sucre, la noche del jueves, cuando intentaba huir debido a los constantes maltratos físicos y psicológicos de los era víctima.
El crimen se registro pasadas las 7:00 de la noche en la urbanización Carimao Contry Club, cuando Carlos Fernández (50) sorprendió a Luisaelena recogiendo sus cosas en una maleta, informaron sus parientes.
La infortunada quien era esteticista de profesión recibió una fuerte golpiza y varias heridas punzopenetrantes.
Según cuentan los vecinos, luego de cometer el crimen, Fernández se cambio de ropa y al salir del lugar gritó que había matado a su cónyuge y que llamaran a la policía, mientras huía del lugar.
El homicida, quien laboraba en el Banco de la Fuerza Armada Nacional (Banfan) como técnico de cajeros automáticos, llegó a casa de sus unos familiares que residenen en Caricuao y tras dejar su camioneta Toyota, Hilux, colo gris doble cabina, tomo un taxi y se entrego en la subdelegación del Cuerpo de Investigaciones Cientificas Penales y Criminalísticas (Cicpc) en El Paraíso.
Maira Echarry, hermana de la victima infomo que desde hacía poco más de un mes la pareja venia pasando por un proceso de separación que se tornó violento, porque al parecer Fernández le era infiel y la maltrataba físicamente.
“Este sábado mi hermana debía ser acompañada por la policía para la mudanza”, informó Maira, quien además contó que el victimario era un machista y solía perderse con frecuencia por varios días, por lo que Luisaelena se confió creyendo que no iría ese día y decidió ir a empacar algunas cosas.
Echarry Rojas deja en estado de orfandad a tres hijos, dos adolescentes de 14 y 16 años de su primer matrimonio y un niño de seis que tuvo con Fernández.
El victimario se encuentra bajo custodia policial y será presentado en tribunales para que se inicie el proceso judicial en su contra.
2018-01-20