Zulvyn Díaz
El oficial jefe de la Policía Nacional Bolivariana Remy Yarmey Bellorín Aguirre de 30 años de edad, murió cuando funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana presuntamente le dispararon, en el momento en el que se encontraba junto con otro oficial en una persecución que se desarrolló el sábado a las 10:00 pm en la avenida Principal de Palo Verde, en el estado Miranda.
El otro agente de la PNB resultó herido. Fuentes policiales informaron que el sábado en la noche los funcionarios de la PNB se encontraban en un punto de control ubicado en Palo Verde, cuando presuntamente un hombre que iba a bordo de una camioneta marca Toyota, modelo Fortuner de color negro que presuntamente había arrollado a una mujer minutos antes, se había fugado de la escena.
Esto propició una persecución entre los dos funcionarios a bordo de una moto y los ocupantes del vehículo.
Tras aproximarse a una alcabala de la Guardia Nacional Bolivariana que estaba en la vía, se generó un intercambio de disparo, en el que los funcionarios castrenses accionaron sus armas y una de las balas perforó la pantorrilla derecha de Bellorín Aguirre y murió desangrado, mientras que el oficial Deiby Medina recibió un tiro en el brazo.
Por el hecho están detenidos tres guardias nacionales en la sede del Cicpc de la avenida Urdaneta donde rinden declaraciones. Se conoció que el ocupante del vehículo identificado como Ricardo Manuel Núñez de Carballo de 33 años fue detenido en el estacionamiento de las residencias Lomas del Ávila, en Palo verde.
Otra versión. Testigos informaron que la camioneta involucrada , no había arrollado a ninguna persona. En el interior del vehículo viajaban varios integrantes de una familia, que quedaron en medio de la balacera. El conductor fue liberado y la camioneta permanece retenida por averiguaciones. Bellorín Aguirre, que residía en la localidad de El Guamacho, sector El limón de la autopista Caracas-La Guaira, tenía seis años de servicio y estaba destacado en el área de Tránsito del Este, en EL Llanito. Era el tercero de cuatro hermanos y padre de tres niños. Los familiares exigieron a las autoridades “meter la mano” en el asunto, ya que “los están matando seguido; si no son los delincuentes quienes matan a los policías, es entre ellos mismos”, indicó el padre de Bellorín Aguirre en las afueras de la medicatura forense.
Hasta la fecha son 60 los funcionarios entre policías y militares asesinados en La Gran Caracas en lo que va de año.
2018-12-17
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