La manicura japonesa es un tratamiento tradicional que fortalece y embellece las uñas, promoviendo un brillo natural sin el uso de esmaltes ni químicos agresivos. Conocida también como "P Shine" en Japón, esta técnica se basa en principios de cuidado holístico y utiliza ingredientes naturales como la cera de abeja y la vitamina A, que nutren la uña desde la raíz, logrando que luzca saludable y brillante de manera natural.
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El objetivo de la manicura japonesa es restaurar las uñas y darles un aspecto pulido y brillante, ideal para quienes buscan un estilo de belleza más natural. A diferencia de las manicuras con esmalte, en las que se aplica un color que cubre la uña, la manicura japonesa se enfoca en nutrir y pulir la uña hasta obtener un brillo rosado que parece "cristalizado".
¿Cómo se realiza?
El proceso de la manicura japonesa es minucioso y consta de varias etapas:
1. Preparación
Se limpia y desinfecta la uña, eliminando cualquier residuo de esmalte anterior. Luego se da forma a la uña con una lima suave y se empujan las cutículas hacia atrás para despejar el área de trabajo.
2. Aplicación de pasta nutritiva
Se aplica una pasta de nutrientes especialmente formulada, rica en minerales, vitaminas y extractos naturales. Esta pasta contiene ingredientes como la cera de abeja y vitamina E, que ayudan a fortalecer la uña. La pasta se masajea suavemente sobre la superficie de la uña para que los nutrientes se absorban.
3. Pulido con polvo de perla
Después de que la pasta ha sido absorbida, se aplica un polvo de perla fina, que se utiliza para pulir y sellar la superficie de la uña. Este polvo le da a la uña su característico brillo perlado.
4. Pulido final
Con una lima especial, se pule la uña hasta alcanzar un brillo natural que puede durar hasta dos semanas.
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