Permanecer sentados en la poceta por más de diez minutos por más inofensivo que parezca, n lo es, esta es una práctica que resulta perjudicial para la salud; es por ello que expertos recomiendan no excederse de los cinco minutos.
¿Por qué hace tanto daño? Porque al permanecer sentados, la parte inferior del cuerpo cae hacia la poceta dado que la gravedad la empuja y genera una presión aumentada y esto impacta en la circulación sanguínea. Esto, además, puede provocar que las venas alrededor del ano se hinchen y se expongan, causando dolor, ardor e incluso sangrado, entre otras molestias.
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¿Cómo afecta permanecer sentados en la poceta?
Cuando una persona pasa mucho tiempo sentada en la taza del baño, las venas y vasos sanguíneos que rodean el ano y el recto terminan inflamándose y llenándose de sangre. Es decir, generan hemorroides, las cuales pueden causar picazón, dolor al sentarse y presencia de bultos.
Además, puede debilitar los músculos pélvicos, se corre el riesgo de sufrir prolapso rectal, y hasta cáncer colorrectal.
Para evitar poner en riesgo la salud, se recomienda que la duración máxima en el baño sea entre tres y cinco minutos, para no afectar el aparato digestivo ni la salud en general.
Importante
Si tienes la costumbre de sentarte en la poceta a revisar el teléfono móvil, debes saber que estás cometiendo un error. Esta acción de permanecer mucho tiempo sentado en la poceta le indica al sistema digestivo que está evacuando y de no ser así, envías señales confusas que pueden generar bolo fecal e incontinencia.
En tal sentido, el doctor Lance Uradomo, gastroenterólogo, aconseja mantener teléfonos, revistas y libros fuera del baño. Estos son elementos que te invitan a mantener la mente ocupada y sin darte cuenta permanecer por mucho más tiempo sentado en la poceta.
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