El té matcha, una forma concentrada de té verde en polvo originaria de Japón, ha ganado popularidad en todo el mundo no solo por su sabor vibrante y su color verde intenso, sino también por sus potentes beneficios para la salud.
Uno de los más destacados es su capacidad antiinflamatoria, atribuida a su rica composición de compuestos bioactivos, en especial los antioxidantes llamados catequinas.
Entre estas catequinas, la epigalocatequina galato (EGCG) es la más abundante y poderosa. Este compuesto ha sido ampliamente estudiado por su efecto sobre los procesos inflamatorios del cuerpo.
La inflamación crónica de bajo grado está relacionada con numerosas enfermedades modernas, como la artritis, la enfermedad cardíaca, la diabetes tipo 2 y algunos tipos de cáncer. El EGCG del matcha actúa inhibiendo las vías que generan inflamación en el cuerpo, ayudando así a reducir el daño celular y mejorar la respuesta inmunológica.
Ventajas del té matcha
A diferencia del té verde tradicional, cuando se consume matcha se ingiere toda la hoja del té molida, lo que significa que se obtiene una concentración mucho mayor de antioxidantes y nutrientes. Esta característica lo convierte en una fuente especialmente potente de compuestos antiinflamatorios.
Además del EGCG, el matcha contiene clorofila, que también posee propiedades desintoxicantes y antiinflamatorias. La clorofila ayuda a eliminar toxinas del cuerpo y a reducir el estrés oxidativo, un factor clave que contribuye a la inflamación.
El contenido de L-teanina, un aminoácido exclusivo del té verde, también colabora indirectamente con la reducción de la inflamación, al favorecer un estado de relajación mental y disminuir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
Aunque el matcha tiene un fuerte potencial antiinflamatorio, no sustituye el tratamiento médico en condiciones inflamatorias graves.
Visita nuestra sección Variedades
Mantente informado en nuestros canales
de WhatsApp, Telegram y YouTube