El líder opositor venezolano y gobernador del estado de Miranda, Henrique Capriles, reveló hoy que la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la alianza de partido opositores al Gobierno, vive un "proceso de revisión" de su liderazgo.
"Hay un proceso de revisión normal en la MUD (…), es necesario que se dé; están en su derecho, pero nosotros también tenemos derecho a decidir con quién hacemos política, cómo nos planteamos la lucha política y cuál es el camino que planteamos", dijo en una entrevista en el canal privado Televen.
La revisión comenzó, dijo, tras las elecciones municipales de diciembre pasado, cuando actuó como jefe de la campaña electoral de los candidatos opositores, quienes conquistaron alrededor de un tercio de los ayuntamientos en disputa.
Previamente, Capriles fue reelegido en diciembre de 2012 gobernador de Miranda, estado que abarca vastas zonas de Caracas.
Asimismo, fue abanderado de la MUD en las presidenciales que en octubre de 2012 ganó el entonces presidente, Hugo Chávez, y en las que en abril de 2013 se impuso el actual gobernante, Nicolás Maduro, de manera fraudulenta, según alega Capriles, por lo que no lo reconoce como presidente legítimo.
Capriles reveló que las críticas en su contra al interior de la MUD se han intensificado debido a que en las últimas semanas no ha dado su apoyo a una serie de manifestaciones propuestas por algunos dirigentes de la alianza que no identificó.
Algunos de ellos, manifestó, "se sientan al lado de uno (…), atrás de uno y uno tiene que estar pendiente porque lo que hay no es la palmadita sino el cuchillo para clavártelo".
Insistió en que mantendrá su oposición al Gobierno de Maduro y la búsqueda de una "salida democrática a la crisis" que vive el país, pero siempre de manera pacífica y constitucional.
"Queremos un cambio pacífico en el país, nosotros no queremos más muertos, no queremos más división entre los venezolanos", repitió.
Sobre algunos diálogos entre oficialistas y opositores registrados en las últimas semanas, en uno de los cuales estrechó la mano de Maduro, Capriles sostuvo que "es muy prematuro concluir si en efecto el diálogo es sincero".
También es prematuro, añadió, vislumbrar si ello permitirá solucionar los problemas del país "o es algo para tratar de bajar las aguas del tema político y ganar tiempo frente a una situación de crisis", principalmente económica y de seguridad ciudadana.
A su juicio, el Gobierno de Maduro "solo emite medidas económicas que ahogan a los venezolanos", aunque sobre la seguridad ciudadana expresó su disposición a colaborar con él.
"Iré a donde sea, hablaré con quien sea y trabajaré con quien sea (porque) para mí la vida de los venezolanos no es tema para meterlo en la trinchera de un partido político", remarcó. EFE