En la graduación siempre hay gente que hace locuras sin pensar. Nos ocurre a todos y es que después de tantos años en los institutos lo que más queremos es gritar al mundo que por fin hemos terminado nuestro periodo en ese maldito sitio. Pero la forma de celebrarlo de esta chica sin duda ha sido de las más exageradas que hemos visto nunca.
Decidió que el espetáculo debía de continuar en una buena muestra de que todo el mundo debe ser capaz de hacer algo que se quede en la memoria de todos para el futuro. En particular sin duda ella consiguió este efecto porque lo de subirse al escenario y aparecer delante de todos tal y como vino al mundo sin duda es algo que nadie se esperaba. Una reacción que le costó críticas a la vez que piropos por parte de todos los asistentes, que independientemente de que lo viesen mal o bien no quedó ninguno indiferente. Es lo que ocurre con estas muestras de espontaneidad llevadas a un campo que suele catalogarse de prohibido.
Miercoles, 29/05/13