A lo largo de toda su vida, la reina Isabel II contó con más de 30 perros, ante esto se genera la duda de lo que pasará con sus corgis, los perros que más destacaban.
Isabel II fue una gran amante de los caballos, de los que ha sido una afamada y premiada criadora, y de los corgis.
Estos perritos la acompañaron durante más de 80 años, desde que a los 7 años le regalaron a Dookie, su primera corgi.
Posteriormente, su padre le regaló a Susan, que acompañó a la todavía princesa en su luna de miel en 1947.
Los corgis galés de Pembroke, son una raza de perro pequeño nativo de Gran Bretaña y se les considera uno de los perros más antiguos.
Tras la muerte de Willow (el último de los corgis de linaje “real”) y Whisper (adoptado tras la muerte de su dueño, uno de los empleados de la reina) en 2018, Isabel II puso punto final a la crianza de los corgis.
Debido a lo afectada que se vio por la muerte de Willow, la Reina no quería que ninguno de sus perros la sobreviviese.
Sin embargo, esta regla se rompió cuando su hijo, el príncipe Andrés, le regaló dos cachorros poco antes de la muerte de su esposo, Felipe de Edimburgo.
Estos nuevos cachorros le trajeron alegría a Isabel II en el año de confinamiento, pues ella misma era la encargada de pasearlos.
Los corgis ahora son del nuevo Rey
Por la muerte de la Reina, sus amados perros tendrán que ser responsabilidad de su hijo, el rey Carlos III y de su esposa Camila, la reina consorte.
Asimismo, también estarán a cargo de Guillermo y Kate Middleton, quienes poseen un cocker spaniel, Orla.
A pesar de no ser los únicos miembros de la familia real en haber acogido perros, es suya la responsabilidad de los animales que acompañaron a Isabel II hasta el final.
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