Tras el fallecimiento del actor Matthew Perry acontecido este sábado, muchos son los buenos y jocosos recuerdos que se vienen a la mente por sus siempre divertidas interpretaciones en la pantalla chica, sobre todo en el serie Friends.
Perry, quien interpretó el personaje de Chandler en la exitosa producción, dejó para la posteridad, lo que podría considerarse uno de los capítulos que más hizo reír a la audiencia; y que se remonta a la vez que Nueva York se quedó sin energía eléctrica justo cuando el personaje de disponía a salir de un local de cajeros automáticos en el cual se encontraba para el momento del "bajón".
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El episodio más divertido de Friends: Chandler quedó encerrado con una modelo
Pues, Chandler se percata que se ha quedado encerrado al fallar el sistema de las puertas de la entidad bancaria, pero no sólo eso, sino que se ha quedado encerrado junto a una reconocida modelo de la famosa marca Victoria´s Secret.
Al darse cuenta, y en plena conciencia de la "suerte" que ha tenido, Chandler se regodea con éxitos y sarcasmo; lo que generó de inmediato las carcajadas del público televidente.
La esbelta modelo atrapada también junto a Chandler, un completo desconocido para el momento, decide llamar por teléfono a su madre para avisarle lo que le ha pasado.
Esto transcurre mientras el protagonista se halla en una esquina, imaginando diversos argumentos a usar para entrar en conversación con la bella mujer.
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Chandler, ocurrente personaje
Pero Chandler se impacienta, porque ya han pasado más de 14 minutos y aún no puede establecer comunicación con la muchacha, un silencio que ella también auspicia al no corresponderle ni una sola palabra.
Chandler no deja de mirarla, y la modelo no sabe incluso cómo reaccionar… Pero a la dama se le ocurre ofrecerle el teléfono celular al personaje encarnado por Perry para que llame a alguien y avise de su estatus si así lo desea.
A lo que Chandler responde en su mente que quisiera llamar como a trescientos amigos de la secundaria para contarles con quién se ha quedado encerrado en el vestíbulo de los cajeros automáticos.
Chandler toma el teléfono y llama al departamento donde vive con sus amigos y les cuenta disimuladamente lo que ocurre, lo que a priori el espectador no logra entender, pero que mágicamente el interlocutor que le contesta, capta todo a la perfección.
Esto causa risas enteras en toda la producción y en gran parte de la audiencia, un humor estadounidense que caló a la perfección en el público joven del momento.
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