El mousse es un postre típico de la gastronomía brasileña muy ligero, y si se trata de frutas, es sumamente refrescante. Pero si hay algo positivo que tiene esta receta es que es muy fácil y rápida de preparar.
Básicamente, para preparar un mousse que quede esponjoso y aireado el truco es batir bien. Mientras mejor lo hagamos, más aire le entrará a la mezcla. Eso si, debe ser con delicadeza para evitar que las claras a punta de nieve se caigan y pierdan su textura elevada.
A continuación te dejamos el paso a paso para preparar este delicioso postre que a todos encantará. Toma nota.
Mousse de parchita
Ingredientes para 10 porciones
7 gramos de gelatina sin sabor.
¼ taza de agua.
1 ½ tazas de jugo parchita.
1 cucharada de jugo de limón.
Una tazas de azúcar.
14 onzas de leche condensada.
6 claras de huevo.
Pulpa de 3 parchitas.
Preparación
– Mezcla el jugo de parchita con el azúcar y el jugo de limón y cocina a fuego bajo hasta que el azúcar se derrita. Deja enfriar.
– Une la gelatina en polvo con el agua y agrega a los jugos de parchita. Remueve hasta que se integre todo.
– Deja reposar por 30 minutos revolviendo de vez en cuando.
– Coloca en la batidora la leche condensada y agrega la gelatina sin sabor y parchita.
– Bate las claras a punta de nieve e incorpora con la mezcla anterior de gelatina y parchita. Ayúdate de una espátula para integrar todo poco a poco con suavidad.
– Vierte en moldes individuales, o uno grande, cubre y refrigera durante toda la noche.
– Si los hiciste en moldes individuales, desmolda colocando cada envase por unos segundos en un poco de agua tibia para que despegue el mousse de las paredes. Si por el contrario, los colocaste en copas, sirve directamente.
– Puedes decorar tu mousse colocando pulpa fresca sobre el postre, así como también puedes acompañar con crema chantilly o helado.
¡Buen provecho!
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