La diabetes es una enfermedad crónica que se produce cuando el páncreas no fabrica suficiente insulina o cuando esta no logra actuar en el organismo.
La diabetes y sus causas
Las principales son la obesidad, factores hereditarios, deficientes hábitos alimenticios. Sus tipos son:
Tipo 1. De forma brusca durante la infancia, adolescencia y primeros años de vida adulta. Es cuando el páncreas no produce insulina para controlar los niveles de glicemia y, por lo tanto, estos se mantienen altos.
Tipo 2. Surge en edades más avanzadas y por regla la padecen otros miembros de la familia. El páncreas, al originar mucha insulina, hace que los órganos y tejidos se “agoten” de ella; es decir, se hacen resistentes a su efecto. También puede suceder que el páncreas produzca muy poca insulina y la glicemia se mantenga alta.
Gestacional. Durante el embarazo la insulina aumenta para incrementar reservas de energía y, en ocasiones, al no producirse causa este tipo de diabetes ocasional.
Síntomas
Quienes padecen esta patología poseen un exceso de glucosa en la sangre (hiperglucemia) que no se distribuye de manera adecuada
-Orinar frecuentemente (día y noche).
-Sensación de hambre inusual.
-Sed excesiva.
-Debilidad y cansancio.
-Pérdida de peso inexplicable.
Diagnóstico: ante esos síntomas el especialista le pedirá que te realices una examen de laboratorio y el caso de presentar la glicemia por encima de 110 mg/dl en ayunas en un examen de sangre, perfil general o perfil 20.
Hábitos alimenticios
El diabético no debe tener una dieta muy restringida, lo más importante es la cantidad total de carbohidratos consumida por comida. Para eso el paciente debe acostumbrarse a medir sus porciones las cuales deberán ser indicadas por el nutricionista.
Recomendaciones
Cuidar los hábitos alimentarios desde temprana edad evitando inculcar la costumbre de consumir chucherías y bebidas azucaradas de cualquier tipo, incluyendo jugos pasteurizados para la lonchera y ofrecer al niño frutas enteras en lugar de jugos.
Tener una alimentación basada en el equilibrio y variedad incluyendo vegetales y frutas al menos tres veces al día todos los días; carbohidratos complejos presentes en alimentos integrales, granos, arroz, pasta, plátano, papa, batata, ñame, apio, ocumo y grasas saludables como el aguacate, ajonjolí, aceitunas, maní, aceites de maíz, soya, canola u oliva.
Evitar el exceso de carbohidratos simples: azúcar, papelón, miel y consumir refrescos, chucherías dulces y saladas, comidas rápidas y alimentos fritos frecuentemente.
Mantener un peso saludable y estar activo (subir escaleras, caminar en lugar de ir en carro, tener momentos de recreación familiar al aire libre, hacer ejercicio de forma regular y, si es posible, practicar algún deporte).
Dato:
La actividad física y pérdida de peso previenen el desarrollo de diabetes en personas con predisposición.
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