Los lentes se han convertido en uno de los objetos más utilizados en el mundo, particularmente para quienes padecen de problemas en la vista, ya que, ayudan a contrarrestar los avances o en su defecto a erradicar la problemática visual.
En ese sentido, existen muchos productos químicos que remueven la suciedad del cristal rápidamente, sin dañar la fórmula oftalmológica que tiene, es decir, puedes aplicarlos sin miedo a qué se puedan dañar.
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Sin embargo, algunas personas optan por preparar fórmulas caseras que cumplan la misma función, a fin de evitar la exposición del cristal a químicos invasivos.
El bicarbonato de sodio en combinación con el vinagre blanco es una de las opciones naturales más utilizadas para limpiar el cristal de los anteojos, gracias a las propiedades que ambos contienen, en particular el último, puesto que, se caracteriza por disolver la grasa y quitar residuos minerales.
Lo ideal es que limpies el cristal de tus lentes mínimo una vez al día con el referido líquido, déjalo actuar durante 10 minutos y frota el cristal del lente con un paño seco, preferiblemente de tela suave.
Cabe destacar, que si el rayón estilla el cristal no debes aplicar ninguna fórmula para evitarlo, en ese caso debes llevarlo a la óptica para reemplazarlos, con el objetivo de que tengas una buena calidad al momento de visualizar con ellos.
En definitiva, cuidar la salud visual es fundamental si quieres gozar de una buena calidad de vida, lo cual es primordial.
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