Lo primero a saber es que las energías, tanto la femenina como la masculina se deben tener perfectamente alineadas en cualquier ser humano, es decir, porque sea mujer no significa que no va a tener energía masculina, está energía es la que motiva a la acción, es la constante lucha de proveer y brindar seguridad, es la organización, la disciplina y el orden, en la que lidera además la autonomía y la autosuficiencia, mientras que la energía femenina atrae las cosas y esta basada en recibir, es muy emocional, observadora a los detalles y la belleza, realza la creatividad en potencia que sirve de imán para atraer las cosas buenas, la energía femenina en sí es el impulso de la energía masculina.
Lo primero a tomar en cuenta es que tienes que descansar para equilibrar la energía masculina, debes soltar y dejar que las cosas fluyan, entender que no estás en una lucha por sobrevivir y si no sincronizas ambas energías no vas a conseguir los objetivos que esperas seas hombre o mujer.
Ya teniendo en cuenta como son cada una puedes identificar cuál tienes más elevada en tu vida y aquí te dejamos unas técnicas para elevar cada energía en la búsqueda del complemento:
Para aumentar la energía femenina dedícate tiempo, conectando contigo mismo y con la naturaleza, date atenciones físicas, haz lo que te gusta, sensibilizate a otras personas o situaciones y no te sientas con inferioridad en relación a nadie.
En cuanto a la energía masculina,solo debes pensar en los objetivos de vida, y tomar acción, no lo dejes en la idea y llévalo a cabo, en esta energía la prioridad eres tú sin pisar a nadie, puedes imponer carácter y darte a respetar sin necesidad de ser controlador.
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