Comer de forma sana en la oficina es un desafío, ya que debes llevar a tu trabajo una comida equilibrada que permita nutrirte y que puedas mantener el organismo protegido. La mejor manera es llevar un menú para que te puedas tener un mejor control.
Comer en la oficina
Desde la casa. Llevar comida en envases es la forma más sana, económica y segura de alimentarte cuando estás fuera de casa. Prepárate sencillos y deliciosos platillos en los cuales debes incluir cosas como pasta, legumbres, arroz, proteínas y verduras.
Alimentación sana. Debes evitar comidas muy pesadas, llenas de grasas y azúcares simples, ya que pueden causar pesadez en el estómago, afectando tu rendimiento laboral.
Realiza tus comidas. En el mercado existen opciones de productos preelaborados, los cuales son una opción sencilla, pero no saludable. Ellos contienen grandes cantidades de grasas, altos niveles de sal, y varios potenciadores de sabor que generan daños al organismo. Así que manos a la obra y a cocinar sanamente.
Aperitivos al natural. Si eres de las que sufren de ansiedad en el trabajo y necesitas estar comiendo a cada rato, te recomendamos aperitivos más saludables, como palitos de zanahoria cruda, almendras, nueces, ensalada de frutas, e incluso postres bajos en calorías (pero estos déjalos para dos días a la semana como máximo).
Sin ansiedad. Comer a cada rato es un signo claro de que estás sometida a mucho estrés y que la ansiedad te está afectando. Llevar preparaciones de té frío y tomarlas cuando te sientas agotada es una excelente manera de probar algo delicioso y sano, sin caer en tentaciones dañinas.
Saludable. Comer despacio y masticar bien favorece la digestión y disminuye la posibilidad de sufrir de gases. Debes evitar las distracciones cuando comes, así que deja el trabajo de lado y concéntrate en degustar tus alimentos.
El mejor sustituto. Cambiar el pan blanco por pan integral es una gran idea porque la fibra que contiene estimula el movimiento intestinal, produce mayor saciedad, frena el envejecimiento de células cancerígenas, es antioxidante y, por supuesto, no propicia tanto el aumento de peso como el pan blanco.
Acude con un especialista. Lo mejor para seguir un régimen que te ayude a mantenerte sana y con una buena figura es que acudas con un nutricionista, quien te ayudará a elaborar un plan alimenticio que se adecue a tus necesidades y al tiempo que tengas disponible para preparar platos saludables.
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