Servir una buena mesa, cumpliendo con las normas del protocolo, es más fácil de lo que se imagina. Un buen principio es comprender que la etiqueta no es una actitud, sino un concepto de buen gusto.
Primera regla, sencillez
La primera consigna es la más importante: la elegancia y la educación se basan en la sencillez. Atender a los invitados es su función principal. Una mesa con demasiados elementos pudiera llegar a verse bien… pero resulta incómoda. Prefiera lo práctico a lo estético, quizás no necesite tantas cosas… pocas, pero lindas, es mejor. Las normas de etiqueta abrazan tantos aspectos que, por el momento, nos concentramos en cómo presentar la mesa correctamente.
El mantel
Lo primero es vestir la mesa con un mantel, preferiblemente blanco, eso sí, muy limpio y planchado; si no tiene uno de ese tono, puede utilizar colores pastel; de lo que se trata es de crear en su comedor un ambiente de limpieza y armonía, además, los tonos claros neutralizan posibles contrastes con la vajilla.
Las servilletas
Es una mesa bien puesta, es casi un pecado utilizar servilletas de papel, así que empiece a pensar en las de tela. Deben ser del mismo color que el mantel y se colocan sobre el plato o a la derecha de éste. Procure tener unas cuantas de repuesto para cambiarlas en caso de que alguna de ellas se ensucie.
La vajilla
Aunque actualmente se encuentra en muchos materiales, lo clásico para ocasiones formales es la porcelana.
Los cubiertos
Los de acero inoxidable, son más comunes. Siempre sebe colocar los más esenciales: cuchara, tenedor, cuchillo y cuchara para postre. El cuchillo va siempre del lado derecho del plato, con el filo apuntando hacia éste; el tenedor a la izquierda, con las puntas hacia arriba; y la cuchara a la derecha del cuchillo. Los cubiertos para el postre se entregan al mismo tiempo que éste.
La cristalería
A la hora de elegirla, evite las copas de colores. Su correcta colocación es frente al plato, ligeramente cargadas hacia la derecha. Prepare una para el agua y otra para el vino, en ese orden, de izquierda a derecha. Si piensa servir algún licor, espere a que lo requieran.
Centro de mesa
Si coloca un arreglo demasiado ancho, reduce el espacio; si es muy alto, seguramente no podrá hablar cómodamente con el invitado de enfrente. En caso de colocar velas no use las aromáticas en la mesa: interfieren con los olores naturales de la comida que seguramente le llevo tiempo preparar.
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