La reflexología, también conocida como terapia de zonas reflejas, es una forma de medicina alternativa que usa la aplicación de presión en los pies y las manos con técnicas específicas de pulgar, dedo y mano sin el uso de aceite o loción.
Es una especie de masaje que te permite relajarte después de una jornada laboral intensa, por ejemplo. Si no tienes quién te lo haga, puedes darte un automasaje de pies y verás cómo tu cuerpo en general se relaja.
¿Para qué sirve la reflexología?
Esta técnica que consiste en aplicar presión alterna con las manos en puntos específicos en los pies, manos, orejas, o la cara, puede afectar varios órganos y partes del cuerpo.
Estos masajes sirven para equilibrar el sistema nervioso mediante la estimulación de estos microsistemas, como las terminaciones nerviosas de los pies; estos que suelen ser los grandes olvidados, a pesar de ser una de las partes más importantes del cuerpo.
Los pies no sólo son los responsables de sostener el peso del cuerpo, sino que además, muchas veces se someten a calzados incómodos y hasta a un nivel de tensión durante el día, cuando se pasa tiempo de pie o si se camina mucho, que empeoran la situación y pueden inflamarse un poco o sentirse cansados.
La reflexología ayuda a aliviar no solo el dolor de los pies, sino además, sirve para tratar:
– Dolor de espalda, de cabeza, de tórax y de cuello.
– Estreñimiento y gastritis.
– Dolores menstruales.
– Alteraciones respiratorias, como el asma.
– Lesiones articulares como luxación, esguince y contusión.
Prepara un automasaje de pie
En primer lugar, coloca los pies a remojar en agua tibia por lo menos durante 15 minutos antes. El agua a esta temperatura ayuda a activar mejor la circulación sanguínea y también da una sensación de calma y alivio.
Transcurrido ese tiempo, seca bien los pies y aplícate un poco de aceite esencial, puede ser de lavanda, rosa de mosqueta o incluso de oliva; aunque esto no es estrictamente necesario, lo que importa es que, además de hidratar, ayude a poder deslizar bien las manos y dedos por toda la superficie del pie.
Luego, con los dedos pulgar e índice masajea cada uno de los dedos y baja poco a poco hasta la planta del pie haciendo presión de arriba a abajo, notarás como la circulación se retrae y luego fluye.
Termina aplicando presión también en los costados del pie y dando suaves movimientos envolventes en el área del tobillo.
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De interés
Expertos señalan que esta terapia aporta excelentes resultados para el organismo y se pueden apreciar de manera inmediata, no obstante, según sea el caso para lo que se aplique, pueden ser necesarias tres sesiones, siempre en función del tratamiento necesitado en cada caso.
Otro aspecto a tomar en cuenta es que esta terapia está contraindicada en casos de osteoporosis del pie o de pierna; enfermedades isquémicas del corazón (angina de pecho, infarto de miocardio); embarazo de riesgo; infecciones agudas en general.
Beneficios de la reflexología
– Elimina el estrés.
– Ayuda a relajar el cuerpo.
– Facilita la relajación física y mental.
– Estimula la circulación sanguínea y linfática.
– Potencia el sistema inmunológico.
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2021-12-09
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