El cuarto de los niños no tiene por qué ser aburrido, todo lo contrario, es el espacio ideal para fomentar su creatividad y estimularlo de una forma creativa, alegre y divertida. Con sencillos pasos podrás transformar ese cuarto infantil, y lo mejor de todo, involucrando las ideas del pequeño haciéndolo sentir el protagonista del proyecto.
Muebles de fantasía
Qué niño no sueña con ser piloto, bombero, princesa, bailarina, y pare usted de contar. Pues con una cama de fantasía, seguro que querrá estar en su cama mucho más tiempo que el previsto para dormir. Este tipo de muebles en forma de carro de carrera, de bombero, de castillo, etc, permitirá dejar volar la imaginación del pequeño, además que lo divertirá al mismo tiempo.
Esquina de juego
No todo puede ser estudio para un niño, el tiempo de juego es igual de importante. El rincón dedicado al juego, diseñado de la manera correcta para facilitar el momento evolutivo, es un espacio estimulante e interactivo que le permita al niño moverse libremente y viajar con su imaginación.
Plantillas
Las paredes son un lienzo en blanco que puedes utilizar a favor de la decoración. Para facilitar la técnica existen variedad de plantillas que puedes usar para pintar las paredes con temas decorativos que le gusten al niño. Si eres más osada, puedes crear tu propia plantilla con un papel o cartón, dándole la forma que más desees. Si quieres todo aún más fácil, puedes utilizar calcomanías especiales para paredes, con los que obtendrás una decoración en solo minutos.
Color
Si no quieres ningún tipo de mueble, cama o mobiliario especial, con solo un toque de color puedes lograr maravillosas decoraciones infantiles. Solo deja volar la imaginación del niño y hazle realidad su fantasía de color, plasmada en las paredes de su habitación. El niño no solo tendrá los colores de su elección, sino que se divertirá pintándola él mismo.