Cada 06 de enero se acostumbra la tradición de comer Roscón de Reyes, se trata de un pastel con forma de rueda cubierto de frutas con relleno de nata, crema o chocolate, pero su gracia real está en la costumbre de esconder un premio en el interior, el pastel es picado y repartido entre los presentes y el comensal que tenga el premio en su postre deberá llevar el Roscón el siguiente año.
La tradición surge en Roma bajo las celebraciones de Saturnalia en la que los esclavos tenían un día libre, ellos acostumbraban compartir una torta en la que se escondía una planta y al esclavo que le saliera sería premiado con favores y pleitesías. Está planta es la Haba, la cual en culturas antiguas representaba la fertilidad y la prosperidad, era tomado entonces como bendiciones y buenas cosechas venideras.
Otro mito asegura que el Roscón de Reyes era usado por los griegos para elegir a sus representantes de cargos entre consejeros y diputados, su forma de hacerlo era incluir el nombre de los candidatos en una pieza de cera e introducirla en el pastel, se paraban en la calle y al primer niño que pasaba se le ofrecía un trozo de pastel a cambio de cortar el tozo y leer en voz alta el nombre que saliera.
Pero fue para el siglo XI cuando se ofrecía un bizcocho a los niños de recursos más bajos en memoria del niño Jesús y el inocente que obtuviera el haba era consentido con regalos como ropa comida y zapatos.
La idea del Roscón de Reyes, también es de una forma de unir a las familias y mantenerlas unidas, es una excusa para volver a reunir a las los integrantes e incluir amigos y a quien le toque el premio deberá ser el anfitrión el siguiente año.
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