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Hugo Devana lleva casi 30 años en televisión. Quizás su cara no es conocida, pero sus producciones sí: es el artífice de espacios como Justicia para todos, 12 corazones, Estrellas de la música, Protagonistas de novela, Mujeres con historias y hombres también o Sudando la gota gorda. A todos les imprimió su sello particular y todos estos programas permanecen en la memoria colectiva.
El argentino se especializó en los campos de dirección y producción desde 1989, ha trabajado en infinidad de países y actualmente se encuentra en República Dominicana, donde trabaja en los reality show Buscándole un novio a mamá y Hay Corazón. Definitivamente, trabajar en pantalla chica siempre estuvo en su genética.
“Vengo de una familia de artistas, mi madre tocaba el bandoneón en una orquesta de señoritas y mi tío abuelo fue compositor de tangos, así que me imagino que algo de eso tiene que ver. A los 11 años ya estaba dando mis primeros pasos en la televisión y aquí sigo”.
Hacer televisión atractiva en una época en la que las redes sociales e incluso Netflix acaparan la atención parece una quijotada, pero para Devana no hay contradicción. “No tienen por qué competir, son cosas parecidas pero no iguales. Yo trato de que se complementen”.
Amor real
Hugo Devana dejó huella en la televisión criolla con sus producciones para RCTV y Venevisión. En República Dominicana produjo la primera y segunda etapa de Masterchef Dominicana con excelentes resultados de rating: el formato de Endemol Shine tuvo una exitosa primera temporada en la pantalla de Telesistema 11, promediando un 44% de share en su ciclo.
Actualmente se encuentra en etapa de preproducción de su primera película, y además ha realizado producciones para canales como Telemundo, Univisión y Cadena Caracol. Con semejante currículum a sus espaldas ¿cree que aún es posible sorprender y cautivar al público? “A mi edad me sorprendo y soy público también, así que sí lo creo”.
Recuerda con cariño la época de la producción televisiva en Venezuela, algo que intenta aplicar en suelo dominicano. “Es difícil comparar la televisión de Venezuela, la época de RCTV y Venevisión con lo que veo aquí. Esa era una industria y yo pude disfrutarla. Atrévete a Soñar, Justicia Para Todos, Protagonistas de Novela… República Dominicana está descubriendo que puede serlo y me tocó, gracias a Dios, hacer mi aporte. Venimos con Hay Corazón y el 21 salimos con The Voice y Quién quiere ser Millonario. Lo que aprendí en Venezuela lo aplico en mi vida diaria”.
Devana es en estos momentos el artífice tras Buscándole un novio a mamá, un reality en el que se le busca pareja a la humorista dominicana Cheddy García. La tecnología de punta a nivel televisivo, los enlaces de transmisiones en vivo y las normas de distanciamiento social fueron parte del proceso de realización de este nuevo proyecto, que pretende crear un precedente en la pantalla chica dominicana con una de las figuras más queridas en ese país.
“Siempre estoy preparado para la crítica y más si es honesta, eso te puede ayudar a mejorar y aprender. La crítica destructiva trato de ignorarla. Ya hay bastante resentimiento y violencia como para darle oídos”.
Buscándole un novio a mamá es un proyecto sumamente ambicioso con calidad internacional sin competencia, que además pretende involucrar al dominicano en todo sentido: para esto se está construyendo una casa de cristal en la Plaza Sambil de Santo Domingo, donde los participantes tendrán que convivir por 10 días con la protagonista, y su misión es ser el primero en salir y conocerla lo suficiente para pasar a la gran final. De nuevo la polémica perseguirá a su proyecto.
Televisión real
Producir un reality show es un asunto pendular. Se puede tener éxito rotundo o un fracaso de iguales proporciones, sobre todo en una época donde las masas son más exigentes y el internet cautiva a la audiencia.
“En instagram encuentras cosas que prefiero no encontrar al igual que Netflix. Yo trato de hacer contenidos que diviertan y que de alguna manera puedan ayudar, sin ser un populista: que una rellenita que tiene problemas de salud mejore, que alguien tenga la posibilidad de cantar y ser oído o bailar y que alguien lo vea. Me gusta devolver a la gente lo que ellos me dan con su tiempo al ver mis programas”, sentencia.
¿Será posible hacer televisión sin polémica? “Se puede hacer de todo, lo importante es que lo que hagas se vea y a la gente le guste”, afirma.
Una vez culminado este proyecto se espera el estreno del programa Hay Corazón y luego se realizará el casting del reality La Voz Dominicana. Luego de un periplo por varios países en los que produjo innumerables espacios televisivos ¿volvería a trabajar en Venezuela?
“Amo a Venezuela, me hice venezolano por ese amor. Espero la libertad para mi país y que recuperemos lo que fuimos, sin descuidar lo que aprendimos en este tiempo. Estoy en República Dominicana porque me siento como en Venezuela. Tengo mi casa en Miami pero me resulta aburrida jajajajaja, y he trabajado mucho en Telemundo y en Univisión. Sin dudas volvería”.
2020-08-14
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