Cuatro semanas después de abandonar el hospital siquiátrico en el que estaba internada, la actriz estadounidense Amanda Bynes, finalmente está presentando una conducta "normal" con su círculo familiar.
La protagonista de "The Amanda Show" enfrentó varios problemas judiciales este año— como conducción en estado de ebriedad, manejo de bicicleta en sentido contrario al tránsito e intentar provocar un incendio a la casa de sus padres—. Pero dichas acciones fueron impulsadas por una esquizofrenia y un desorden bipolar diagnosticado posteriormente.
La joven fue internada por primera vez en una clínica psiquiátrica a comienzos de este año, pero logró salir debido a que no se podía obligar su permanencia en contra de su voluntad. Sus padres la llevaron en otras ocasiones a la fuerza, pero sólo podía retenerla un tiempo limitado.
Tras presentar el caso a la justicia, los progenitores de la actriz de 28 años lograron obtener su custodia legal en octubre pasado. Ese mes la volvieron a hospitalizar y finalmente la joven presentó mejoras.
A comienzos de diciembre, fue dada de alta y sus padres la llevaron al domicilio familiar.
Un portal web informa que el equipo médico de la joven, le retiró los medicamentos para estudiar su comportamiento sin ellos. No obstante, debe realizar actividad física todos los días. por esto, practica pilates, yoga y meditación a diario.
2014-12-26