La obra teatral "La imaginación del futuro" de la compañía chilena La Re-Sentida recrea, a partir de este viernes y hasta el dos de junio, las últimas horas del presidente socialista Salvador Allende desde la ficción.
"El argumento es una anécdota donde ministros contemporáneos con ideologías de hoy se retrotraen en la historia y van a asesorar a Salvador Allende en ese momento de crisis", señaló hoy a Efe Marco Layera, escritor y director de la pieza teatral, que salta al escenario a poco de cumplirse 40 años del golpe militar que terminó con el Gobierno y la vida de Allende.
Layera explicó que en "La imaginación del futuro" se da un juego de contraposición entre "un idealista" como Allende y una clase política actual "más pragmática y sin ideología".
Estos ministros de hoy que viajan a la década de los setenta juegan "con distintas estrategias" para salvar el Gobierno del presidente socialista y evitar la dictadura.
"Al final deciden realmente hacerlo renunciar porque entienden que si Allende renuncia, que es la única vía posible, nos evitaríamos 17 años de dictadura militar, todas las violaciones de los derechos humanos y hasta el peso que hasta hoy mantiene la dictadura" en la sociedad chilena, indicó el director.
Los ministros le cuentan el futuro a Allende, "que no es como él soñó", que a diferencia de lo que dijo en su último discurso – que "la historia la hacen los pueblos" y que "otros hombres superarán estos días grises"-; esto no fue así, pues "los días grises nadie los superó".
"Después de su muerte vino una dictadura feroz y le vamos a contar también que al parecer la historia no la hacen los pueblos. Todo desde un lado muy pesimista", manifestó Layera.
"La imaginación del futuro", que se representará en el centro cultural Matucana 100 en Santiago, recibe este nombre porque según su creador lo que están tratando de hacer actualmente los "movimientos sociales" es lo que intentó Allende durante su mandato y que acabó con un golpe de Estado.
Con un carácter "delirante" en la que se mezclan momentos de "humor" con otros "dramáticos" o "tiernos", Layera busca que la obra "divida aguas".
"Esperamos que sea provocadora, estimulante, que se pueda reflexionar, entretener. Hay gente que se puede parar e ir. En algún momento alguien nos puede gritar algo. Estamos expuestos a trabajar eso, eso es lo interesante", manifestó./EFE
Jueves 16/5/13
(RB)