Consumir un producto natural siempre resulta más beneficioso que aquellos procesados y es por ello que en los últimos años se ha extendido a nivel mundial el consumo de alimentos naturales.
Muchas personas han comenzado alternativas para sustituir sobre todo aquellos alimentos de origen animal, por ejemplo, la leche de vaca.
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Una alternativa que ha venido popularizando es la leche de almendras, la cual posee un agradable sabor a nuez y textura cremosa. Este producto natural al que se le otorgan cualidades curativas, tiene como ventaja, que es apta para celiacos y veganos
Beneficios de este producto natural
La leche de almendras se obtiene de la mezcla del fruto seco molido con agua. Posteriormente se cuela para eliminar los sólidos. Aunque no es técnicamente una leche, posee una gran cantidad de minerales, vitaminas y fibras. Al integrar este producto a la dieta diaria, se suman múltiples nutrientes al organismo.
Es una de las más conocidas dentro de las leches vegetales, por su fácil preparación y porque se ha convertido en la gran aliada de veganos y celiacos. Actualmente, se consigue en supermercados, casas naturistas y ventas de alimentos de la mayoría de los países.
Esta leche industrializada contiene vitamina D, calcio y proteínas agregadas. En su estado natural, este fruto seco es rico en minerales, vitamina E y nutrientes con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, que contribuyen al buen funcionamiento del corazón.
Por ser una bebida libre de lácteos y gluten, es una excelente opción para los que sufren de intolerancia a la lactosa. Tomar un vaso todos los días ayuda a estimular los procesos digestivos e intestinales, aporta sensación de saciedad y también previene el estreñimiento, la inflamación y la presencia de gases.
Su alto contenido de grasa saludable, especialmente de ácido oleico, beneficia a los lípidos en sangre y ayuda a reducir los riesgos de enfermedades cardíacas.
Su composición solo tiene 1% de aceite, por lo que contribuye a mantener muy bajo los niveles del colesterol malo y los triglicéridos.
Tampoco tiene azúcar y está compuesta por menos de 2% de hidratos de carbono, por lo que se recomienda para pacientes con diabetes y quienes siguen un régimen bajo en carbohidratos.
Es una estupenda fuente de vitamina D, la cual ayuda a fijar el calcio en los huesos. La ingesta de esta bebida reduce el riesgo de huesos frágiles, fatiga crónica y músculos débiles. Se sugiere incorporarla en tu alimentación.
En algunos países, los productores de lácteos han creado la estrategia de salud pública de enriquecer algunos alimentos, por ello una taza de leche de almendras comercial puede contener 37% o más de tu necesidad diaria de vitamina D.
Usos en la gastronomía
Por ser un alimento natural y rico en nutrientes, cada día son más las personas que la incorporan a su dieta diaria, como base de sus platos principales o como bebida. Estas son algunas de las alternativas que puedes incluir en tus menús:
- Agrégala al cereal en lugar de la leche normal.
- Agrégala a tu café o té.
- Mézclala en batidos.
- Prepara un arroz con leche
- Preparación de helado sin lácteos.
- Úsala en sopas, salsas y aderezos para ensaladas.
- Sirve como sustituto de la leche en muchos alimentos horneados.
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