El veterano presentador estadounidense Larry King, de 86 años, está pasando por un duro momento personal después de que en apenas tres semanas perdiera a dos de sus hijos. Andy, que tenía 65 años, murió repentinamente hace unos quince días mientras que su hija Chaia, de 51 años, falleció el pasado jueves tras luchar contra un cáncer de pulmón.
“Es con tristeza y el corazón roto de un padre que confirmo la reciente pérdida de dos de mis hijos, Andy King y Chaia King. Ambos eran almas buenas y amables y los extrañaremos mucho”, escribió King en su cuenta de Facebook.
“Andy falleció inesperadamente de un ataque al corazón el 28 de julio, y Chaia falleció el 20 de agosto, poco tiempo después de haber sido diagnosticada con cáncer de pulmón”, dijo el ex presentador de “Larry King Now”.
“Perderlos se siente tan fuera de lugar. Ningún padre debería tener que enterrar a un hijo”, continuó King. “Mi familia y yo les agradecemos por sus amables sentimientos y buenos deseos. En este momento, necesitamos un poco de tiempo y privacidad para sanar. Les agradezco que lo respeten”, concluyó King en su comunicado en la red social.
King era padre Chaia con su ex esposa Alene Akins. Adoptó a Andy, el hijo de Akins, de una relación anterior, después de que los dos se casaron en 1961. Se separaron en 1963 y volvieron a estar juntos en 1967 y volvieron a separarse nuevamente en 1972. La mujer falleció hace tres años y él le dedicó un sentido mensaje en las redes sociales: “Era una gran dama”.
El periodista también es padre de Larry King Jr. -fruto de su relación con su segunda esposa, Annette Kaye- y de Chance, de 21 años, y Cannon, de 20, nacidos de su séptimo matrimonio con Shawn King, de quien se separó en agosto pasado, tras 22 años juntos.
“Lamento el matrimonio”, le dijo King a la revista People en ese momento. “Siempre me preocuparé por mi esposa. Pero llegó un punto en el que no nos llevábamos bien”.
King, quien se retiró de la pantalla de CNN en 2010 tras 25 años de transmisión ininterrumpida de Larry King Live, no pudo despedir a sus hijos en persona ni asistir a sus funerales en Los Ángeles porque todavía se está recuperando de un derrame cerebral que lo dejó en coma durante varias semanas el año pasado. El presentador reveló que fue su hijo Chance quien le dio fuerzas para vivir cuando él ya veía la muerte de cerca.
Información de Infobae
2020-08-23
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