Agentes del ICE detuvieron a Kevin Contreras-Mendoza, un inmigrante indocumentado mexicano, quien había agredido sexualmente a una mujer estadounidense el Día de la Independencia en 2018.
La policía local de Portland, Oregón, lo dejó en libertad debido a las leyes de santuario, a pesar de que había una orden de detención del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), reseña New York Post.
El hecho ocurrió el 4 de julio de 2018, cuando Contreras-Mendoza siguió a una mujer por la calle, la agarró por detrás y la manoseó violentamente mientras ella pedía ayuda.
La secretaria adjunta del DHS, Tricia McLaughlin, expresó su satisfacción por la captura de Contreras-Mendoza, señalando que los estadounidenses estarían más seguros sin él en las calles.
Criticó a las autoridades de Oregón por no cumplir con la orden de detención y dejar que un delincuente sexual regresara a la comunidad. Contreras-Mendoza fue finalmente capturado el 13 de septiembre de 2018 y condenado en 2019.
A pesar de la orden de detención emitida por ICE, la policía local ignoró la solicitud y permitió que Contreras-Mendoza regresara a las calles.
Se desconoce cuándo cruzó ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México. Oregón fue el primer estado en convertirse en un santuario para inmigrantes ilegales, aprobando restricciones en 1987.
A pesar de la resistencia de Oregón a colaborar con ICE, el DHS ha manifestado su intención de continuar realizando arrestos en estados santuario.
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