Wimbledon ha decidido romper con una tradición centenaria y autorizar el uso de brazaletes negros en señal de luto por la muerte de Diogo Jota y su hermano André. Este gesto representa un momento de humanidad en medio de la rigidez de su histórico código de vestimenta, que obliga a los jugadores a vestir totalmente de blanco.
La excepción fue solicitada por el tenista portugués Francisco Cabral, quien mantiene una fuerte conexión con la familia Jota desde su infancia en Oporto. Cabral llevará el brazalete durante su próximo partido de dobles en el torneo londinense, como forma de honrar la memoria de su amigo.
El gesto ha sido recibido con respeto por parte del público y otros jugadores del circuito. Incluso Rafael Nadal expresó sus condolencias públicamente, sumándose a una ola de solidaridad que trascendió el tenis.
Esta decisión marca un hito dentro de Wimbledon, que pocas veces ha modificado su estricto reglamento. Permitir este homenaje simbólico es una muestra de sensibilidad ante una tragedia que ha conmovido al mundo del deporte.
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