Francia baraja la entrada en vigor durante el mes de junio para los viajes a su país del certificado de COVID. Que la Unión Europea tiene intención de poner en marcha desde el 1 de julio. Y trabaja en una coordinación más estrecha de los protocolos de países próximos, como España.
El secretario de Estado de Asuntos Europeos, Clément Beaune, explicó este lunes, en una entrevista radiotelevisada por RMC y BFMTV. Que van a tomar decisiones en la primera semana de junio "para anticipar un poco" respecto al calendario de la UE.
"Es una posibilidad" para que puedan utilizar desde ese mismo mes de junio el certificado las personas que lleguen de "países donde la situación es segura", señaló.
El responsable francés insistió en que el certificado verde europeo "es un verdadero progreso de coordinación". Que permitirá a una persona franquear las fronteras interiores de la UE si acredita que se ha vacunado contra la COVID. O presenta un test negativo.
Francia solo aceptará las vacunas que han sido autorizadas por la Agencia Europea del Medicamento (AEM), es decir las de Pfizer-BioNtech, Moderna, AstraZeneca y Janssen.
Se excluyen, por tanto las chinas o la rusa Sputnik V con el argumento de que "queremos estar seguros de que las personas que están en Francia para la temporada turística están bien protegidos".
La coordinación con otros miembros de la UE continúa para evitar que los países añadan otros requerimientos a los acordados conjuntamente. Y para armonizar al máximo los protocolos.
Por eso Beaune contó que junto al ministro francés de Sanidad, Olivier Véran, esta tarde van a mantener una reunión con responsables de siete países próximos con los que Francia tiene los mayores flujos turísticos, entre los que están España o Portugal, para "tratar de tener exactamente las mismas reglas".
EFE
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