Un hombre armado irrumpió en el vestíbulo de la extensa torre de oficinas 345 Park Avenue y abrió fuego este lunes en Midtown Manhattan, un agente del Departamento de Policía de Nueva York estaba entre las cuatro víctimas de este suceso.
Didarul Islam de 36 años, inmigrante de Bangladesh, fue descrito por sus compañeros como un héroe, deja a dos hijos pequeños y a su esposa que está embarazada de su tercer hijo.
“Se arriesgó, hizo el sacrificio máximo: recibió un disparo a sangre fría, vistiendo un uniforme que representaba la promesa que le hizo a esta ciudad. Murió como vivió, un héroe”, dijo la comisionada del Departamento, Jessica S. Tisch, en una conferencia dada el lunes por la noche.
Islam estaba fuera de servicio, pero uniformado y trabajando como agente de seguridad en el edificio cuando Shane Devon Tamura, de 27 años, le disparó y perdió la vida.
“Estaba haciendo el trabajo que le pedimos que hiciera”, dijo Tisch.
Shane Devon Tamura habría jugado fútbol americano
El atacante tenía un historial de problemas mentales y tenía planeado atacar a la sede de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL) por una afirmación no fundamentada de que sufría de una encefalopatía traumática crónica, pero se equivocó de ascensor.
El hombre había jugado al fútbol americano en la escuela secundaria en California hace casi dos décadas. Es de destacar que es común que algunos jugadores quedan con conmociones cerebrales debido a este deporte.
Los investigadores creen que luego de haber disparado a una quinta persona, Tamura se suicidó, así lo indicó el alcalde de Nueva York, Eric Adams este martes.
El tiroteo tuvo lugar en un rascacielos que alberga las sedes tanto de la NFL como de Blackstone, una de las firmas de inversión más grandes del mundo, así como otros inquilinos.
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