En Venezuela se considera santos a unas cuantas figuras que sirvieron al ámbito religioso, y por sus acciones se han ganado títulos que los acercan a la santidad.
También porque los devotos les tienen fe y les piden que les concedan milagros.
No hay otra personalidad católica que sea más venerada que José Gregorio Hernández; es el cuarto beato venezolano.
Aunque su proceso de canonización fue el primero que se inició.
Actualmente es la tercera beatificación dentro del país; su ceremonia se realizó en el Colegio La Salle de Caracas el 30 de abril de 2021.
En su tierra natal Isnotú, estado Trujillo, está su espacio llamado Santuario del Niño Jesús, ahí se encuentran sus restos.
Es normal ver que personas acuden al lugar para agradecer por los favores que concede el beato.
Habitualmente al Siervo de Dios se le piden milagros de sanación, tal fue el caso de Yaxury Solórzano Ortega.
También puede leer: Gerardo Blyde, Jesús María Casal y Lorenzo Mendoza participaron en el aniversario de la UCAB (+Declaraciones)
Quien fue herida por un arma de fuego en la cabeza, y después de su curación, se comprobó el milagro y la Santa Sede aprobó la beatificación.
María de San José o Madre María fue la primera beata venezolana, aunque su proceso no se realizó en el país, sino en el Vaticano.
La ceremonia se celebró el 7 de mayo de 1995, y fue admitida por el papa Juan Pablo II en 1993.
Después de que ocurriera la sanación de la hermana Teresa Silva quien estaba enferma, y la Madre María había profetizado años antes su curación.
Existe en Maracay un templo dedicado a ella donde reposan sus restos, y al que la gente visita para agradecer por acciones que han recibido, también van para suplicar por milagros.
La Madre Candelaria de San José fue la segunda beata, en vida hizo obras de caridad, y cuido a enfermos y heridos.
Además, fundó las Hermanas Carmelitas de Madre Candelaria en Alta Gracia de Orituco, estado Guárico.
Quienes se repartían en hospitales de la región para la atención.
Milagros y devoción por los santos
Su santificación fue aprobada por el papa Benedicto XVI el 24 de abril de 2008, por el milagro concedido a Rafaela Meza de Bermúdez en 1995 proveniente de la misma zona de la Madre.
Oró a esta para que su hija naciera, debido a que se le había diagnosticado un embarazo riesgoso, y después de realizarle un ecosonograma mostró ausencia de actividad en el corazón.
Al tiempo nació una niña bautizada como Milagros Candelaria en honor a la Madre. Ella estuvo presente en el acto de declaración.
Por su parte, Carmen Rendiles nació con capacidades especiales y unirse a una congregación era difícil debido a esto.
Fue hasta el 25 de febrero de 1927 que ingresó a la Congregación Siervas de Jesús en el Santísimo Sacramento.
Con este grupo se trasladó a Francia y después de demostrar cualidades, se nombró como maestra de novicias.
Un tiempo después volvió a Caracas donde se encargó de lo mismo.
Asimismo, en 1951 la nombraron como Superiora Provincial, sus obras se basaron en la fundación de colegios.
Como el Colegio Belén en Caracas o el Colegio Nuestra Señora del Rosario en la Punta, estado Mérida.
También puede leer: Israel informa de la muerte de un alto comandante de Hamás
De igual manera, Carmen donó su casa paternal para crear un colegio para la educación de niñas de escasos recursos.
El 18 de diciembre de 2017 el papa Francisco aprobó el decreto que reconoce el milagro que fue la curación del brazo de la cirujana Trinette Durán de Branger.
quien recibió una descarga eléctrica en el mismo, se recuperó en 2003 después de pedir la intercesión de la Madre Carmen para curarse.
Una de las características de la venezolanidad es la creencia en lo religioso y una muestra son los favores que cada día piden a sus santos de cabecera.
Para mantenerte informado y estar al tanto de todo lo que ocurre en el mundo y en el país, haz clic en el siguiente enlace. Sigue nuestro canal en Telegram https://t.me/Diario2001Online