Con la espalda contra la pared y una desventaja de 1-3 en la serie, los Boston Celtics reciben este jueves en el TD Garden a unos New York Knicks envalentonados tras su victoria en el cuarto partido (121-113).
Para los Celtics, la victoria en este quinto juego es una necesidad imperante si desean mantener viva su esperanza de avanzar en el torneo y evitar una eliminación prematura a manos de un rival en alza. ¿Podrán los locales revertir la inercia negativa y forzar un sexto partido? Analicemos el crucial duelo y ofrezcamos un pronóstico fundamentado.
Los Boston Celtics han demostrado consistencia a lo largo de la temporada, con seis victorias en sus últimos diez partidos. Su ofensiva suele ser efectiva, superando la barrera de los 107 puntos por encuentro. En defensa, también han mostrado solidez, controlando los tableros y defendiendo el perímetro. Sin embargo, la relajación mostrada en algunos momentos de la temporada regular parece estar pasándoles factura en estos playoffs. Tras una victoria esperanzadora en el tercer partido, la derrota en el cuarto expuso ciertas desconcentraciones y una falta de la intensidad necesaria para frenar el ímpetu de los Knicks. La posible baja de Jayson Tatum, quien sufrió una lesión en el tobillo en el último encuentro, añade una preocupación mayúscula al panorama de los Celtics.
Los New York Knicks están capitalizando un juego equilibrado en ambos extremos de la cancha para sorprender a los campeones. Si bien su promedio de puntos en playoffs (104.4) es ligeramente inferior al de Boston, su defensa ha sido clave para limitar el ataque rival. Históricamente, su juego cerca del aro y el liderazgo de Jalen Brunson han sido sus principales armas. Precisamente, la brillante actuación de Brunson en el cuarto partido (39 puntos y 12 asistencias) fue fundamental para la victoria.
El equipo neoyorquino mostró una gran fortaleza mental al remontar una desventaja en la primera mitad, con jugadores como OG Anunoby y Mikal Bridges aportando puntos clave. Con una moral alta y seis victorias consecutivas como visitantes, los Knicks llegan a Boston con la firme intención de sellar su pase a la siguiente ronda.
El historial de enfrentamientos directos entre Boston y Nueva York muestra una clara ventaja para los Celtics, con 34 victorias en 55 encuentros previos. Sin embargo, el último precedente, la derrota del lunes, evidencia el cambio de dinámica en esta serie.
A pesar de promediar un sólido 107.95 puntos por partido en estos duelos históricos, la ofensiva de Boston se vio mermada en momentos clave del último encuentro, con un preocupante 37.5% de acierto en tiros de campo. Además, la batalla por los rebotes fue claramente favorable a los Knicks (43-31), un factor que los Celtics deberán controlar si quieren imponer su juego en casa.
Para los Celtics, el quinto partido en el TD Garden es una cuestión de vida o muerte en estos playoffs. Deben frenar la ofensiva imparable de los Knicks con una defensa reencontrada. La posible ausencia de Tatum exige un nuevo líder en ataque. Los Knicks, con la eliminación del campeón a la vista, deben mantener su defensa, intensidad y la magia de Brunson para sellar la serie.
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R: Luimar González Yanes
Meridianobet
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