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Al Clínico Universitario le falta más que "una ayudita"

Martes, 07 de julio de 2015 a las 07:30 pm
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Armando Altuve
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“Menos mal que este hospital es un roble, porque si no se nos hubiese caído encima a todos hace tiempo”. Esa fue la expresión que soltó una enfermera del Hospital Universitario de Caracas (HUC), un centro de referencia nacional ubicado dentro de la Universidad Central de Venezuela (UCV), que a pesar de mantenerse de pie, en los 61 años de fundado que tiene. Pero hoy, algunas de sus áreas carecen de mantenimiento.

En un recorrido realizado por el Diario 2001 por las instalaciones del nosocomio, se pudo constatar que algunos pisos tienen filtraciones y pintura corroída en las paredes de algunos servicios; los plafones corridos están sueltos en el sótano, donde funciona el servicio de radioterapia oncológica; los ascensores funcionan a “media máquina” (de 10 elevadores, solo 5 están operativos, y  no poseen aire); y en las habitaciones los baños están en precarias condiciones.

Un problema crónico. La ausencia de mantenimiento en algunas áreas responde a la falta de materiales. Un obrero de plomería, que prefirió no dar su nombre, indicó que no cuentan con implementos y herramientas para trabajar. “Hacen falta tubos, llaves, alicates, destornilladores”, dijo la fuente anónima.

Comentó que  las habitaciones de los médicos residentes, enfermeros y pacientes tienen dañadas las duchas y las pocetas. Uno de los médicos residentes indicó que en una de las habitaciones, ubicadas en el piso 11, hay una gotera en el lavamanos, y de cuatro retretes, solo dos están en buen estado.

El ambiente de precariedad se repite en todos los pisos, al ingresar a las habitaciones de los pacientes, ubicadas en el servicio de Medicina III,  donde los baños tienen algunas cabinas que están clausuradas, otras no tienen puertas. Las paredes están rotas y los inodoros no cuentan con rejillas. “Por allí hasta salen ratas, qué te digo ratas, conejos”, resaltó una enfermera.

Debido a que las duchas no  tienen puertas, los pacientes han tenido que colocar cortinas improvisadas con bolsas negras de las utilizadas para botar basura.

Varias regaderas no cuentan con grifos. Enfermeras denunciaron que en el centro los sanitarios para pacientes ambulatorios están inoperativos. “Ellos deben utilizar el baño de los pacientes”, comentó una de ellas.

En algunos pisos, las bocas de visita que están ubicadas en el cielo raso brillan por su ausencia.  También algunos servicios carecen de buena iluminación.

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