El periodista surinamés Jason Pinas, sufrió este jueves una nueva intimidación al encontrarse dos granadas de mano en un automóvil frente a su vivienda.
Recordemos que el periodista fue recientemente agredido por guardaespaldas gubernamentales.
La Asociación de Periodistas de Surinam condenó en un comunicado "este brutal ataque a la vida" de uno de sus miembros, de igual forma, pidió "protección inmediata para Jason".
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Por otra parte, acusó a "personas relacionadas con el vicepresidente", de estar relacionada con el ataque de las granadas.
Las granadas fueron pegadas con cinta adhesiva debajo del automóvil del hermano de Pinas, el cual estaba estacionado junto a la residencia del periodista.
El hecho se produjo un día después de que la Asociación exigiera una investigación completa sobre el asalto perpetrado hace dos semanas contra Pinas por parte de los guardaespaldas del vicepresidente de Surinam.
El personal de seguridad le arrebató el teléfono a Pinas cuando trató de tomar una foto del vicepresidente frente al edificio del Parlamento.
El periodista explicó que lo obligaron a tirarse al suelo y que después, tuvo que ser atendido por dolor en el cuello, la cabeza y el brazo.
Al no tener lesiones físicas, la Fiscalía no tomó medidas contra los guardaespaldas.
Sin embargo, la Asociación de Periodistas de Surinam insistió hoy que tras el descubrimiento de las granadas "la investigación debe continuar".
También. el pasado 16, decenas de periodistas de medios de comunicación de todo el país protestaron frente al Parlamento por la agresión a Pinas.
EFE
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