Un tribunal de Lima dictó sentencia contra un bailarín húngaro de Dioses del Circo, acusado por tocamientos indebidos a una actriz venezolana durante su último show.
De acuerdo con La República, Attila Vajda Zoltan, mejor conocido como "Tyler", fue denunciado por Korina Rivadeneira, quien lo acusa públicamente de haberla tocado sin su consentimiento en múltiples ocasiones.
La decisión judicial de prisión suspendida, que no implica el ingreso inmediato del condenado a un centro penitenciario siempre y cuando cumpla con una serie de condiciones establecidas por el juzgado, pone fin a un proceso que generó una atención mediática y debate público sobre el respeto y la seguridad de los artistas en los escenarios.
¿Cuál es la condena que recibirá el bailarín húngaro?
El pasado jueves 24 de julio, durante una audiencia que se llevó a cabo en la Corte Superior de Justicia de Lima, ubicada en el jirón Huancavelica, en pleno Centro Histórico de la ciudad, un juez ordenó la sentencia de 30 meses de prisión suspendida por los cargos imputados a Attila Vajda Zoltan.
La medida, que también incluye el pago de una multa valorada en S/ 10 mil a favor de la agraviada, fue emitida luego de que la defensa de la acusada presentara pruebas en la sala.
Dichas pruebas evidenciaban el impacto emocional severo que sufrió la víctima, lo que influyó en la decisión del tribunal.
Por su parte, el bailarín se declaró culpable de los cargos y ofreció disculpas a la modelo, asegurando que su intención no fue ocasionarle ningún daño.
¿Qué dijo Korina Rivadeneira?
A través de las redes sociales se difundieron videos e imágenes del momento en que el bailarín húngaro toca de forma indebida a la modelo.
Ante ello, la venezolana Korina Rivadeneira relató en su programa cómo se sintió al enfrentar aquella situación.
"Me sentí un objeto utilizado y manipulada completamente, que me pasaban de mano en mano".
Rivadeneira relató que durante esos momentos trató de ser "lo más cortés posible" para cumplir con el show.
Además, declaró que los momentos previos a la agresión el equipo fue muy amable y ella, al no conocer del todo el espectáculo, no deseaba salir al escenario.
“¿Cómo se debe sentir para esas víctimas que han sufrido agresiones mucho peores y que además viven con sus agresores? Eso debe ser horrible. Y que encima no tengas el apoyo de tus familiares”, expresó Rivadeneira.
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