Redacción 2001.com.ve
El Observatorio Venezolano de la Salud (OVS) aseguró que el Estado venezolano adoptó medidas regresivas que han comprometido el derecho a la salud y a la alimentación.
En cuanto a la salud indicaron que las autoridades han "adoptado medidas regresivas que han comprometido severamente el derecho a la salud y a la alimentación y ha ignorado la realidad del país, caracterizada por una gran escasez de insumos médicos, medicamentos y alimentos. La infraestructura hospitalaria se encuentra sumamente deteriorada y los pacientes deben enfrentar situaciones injustificables como la falta de agua, de electricidad e incluso de camas" informó el OVS en un comunicado.
Destacaron que el alto índice de mortalidad materna y neonatal es una clara evidencia del "limitado acceso a los servicios de salud y de la inadecuada nutrición de las madres venezolanas".
Mientras que en materia alimenticia han promovido el agravamiento del ya deteriorado acceso a los alimentos, prueba de ello es la alta inflación, las continuas amenazas al sector privado y la implementación de políticas de distribución de alimentos basadas en la orientación política de las personas, no permiten el acceso de todos los venezolanos a los alimentos, ni siquiera los básicos, para cubrir sus necesidades. Como consecuencia de ello incrementó la escasez de alimentos.
A este respecto el OVS lleva registro de al menos 4.725 protestas ocurridas entre enero y agosto de 2016, en la que los ciudadanos exigen el cumplimiento de sus derechos económicos y sociales, con aumento de detenciones e irregularidades en los procesos de adquisición de alimentos en los estados fronterizos Táchira y Zulia.
En 2011 durante el Examen Periódico Universal (EPU), de las Naciones Unidas Venezuela aceptó tres recomendaciones sobre el derecho a la alimentación, referidas a agilizar la implementación de medidas y políticas para la reducción de la pobreza, erradicación de la malnutrición y seguridad alimentaria; continuar aplicando políticas públicas para la erradicación de la pobreza extrema y la hambruna; y desarrollar políticas y programas orientados a garantizar el derecho a la alimentación. Sin embargo no ha cumplido a cabalidad estos compromisos.
Mientras que en materia de Salud hubo cinco recomendaciones para Venezuela: reforzar los esfuerzos para reducir la mortalidad materna y neonatal a través del incremento del acceso a servicios de salud sexual y reproductiva, así como facilitar la calidad y las instalaciones para la salud de la mujer; revisar la política de salud materna e introducir los cambios necesarios para garantizar el acceso de las embarazadas a los centros médicos en todo el país; continuar el mejoramiento y la expansión de los servicios de salud que fueron concebidos para la atención primaria de las personas y así prevenir y combatir enfermedades; implementar políticas y programas para garantizar el derecho a la salud y seguir apoyando aquellos que hubieran mostrado éxito. En estos tópicos hubo un retroceso significativo según detalla el OVS.
Venezuela tendrá que someterse por segunda vez a EPU, el 1 y 2 de noviembre en el que las Naciones Unidas que examina el cumplimiento de los Estados miembros de sus obligaciones relativas a los derechos humanos.
2016-10-31