Los proyectos vanguardistas y sostenibles despuntan en Milán (Italia). Poco después de que unos arquitectos españoles ganasen en el concurso internacional Magnifica Fabbrica para la creación de un nuevo complejo para el Teatro alla Scala, se ha presentado un nuevo plan para convertir el nuevo San Siro en todo un referente de arquitectura verde.
Uno de los grandes arquitectos, por decirlo de algún modo, ecológicos, Stefano Boeri, ha presentado su propuesta para el nuevo San Siro, el estadio de fútbol compartido entre el Inter y el Milan, que será demolido en 2027, cuando cumpla 101 años.
El Estadio Forestal Internacional, ese es su nombre, se levantaría en una zona de más 800 hectáreas e incluye, junto con la instalación deportiva, una serie de servicios y construcciones públicas y semipúblicas (oficinas, hotel, palacio de congresos, espacios comerciales, etc.) destinadas a mejorar la combinación funcional y fomentar el uso y disfrute permanente de la zona.
“A nivel arquitectónico, el proyecto contempla un Estadio Forestal en el que los árboles rodean el terreno de juego y las gradas y la naturaleza viva se convierten en protagonistas de la experiencia futbolística y de un nuevo paisaje urbano para todos los ciudadanos”, expone Boeri en su web.
De hecho, está diseñado para albergar 5.700 m2 de cubiertas verdes horizontales, 7.000 m2 de fachadas verdes con 3.300 árboles y 56.300 arbustos de 70 especies diferentes, que se espera que absorban hasta 162 toneladas de CO2 al año. Un auténtico pulmón verde para Milán y un lugar de conexión verde con el tejido urbano, capaz de ayudar a limpiar el aire, absorber el polvo y regular la temperatura de la zona.
El objetivo de este proyecto es el de construir un complejo deportivo que consuma la menor cantidad de energía y genere las mínimas emociones posibles.
Concretamente, contaría con enormes superficies fotovoltaicas y un cuidadoso estudio de gestión de aguas y residuos, ya que el Estadio Forestal pretende convertirse en un complejo energéticamente autosuficiente y respetuoso con el medio ambiente.
Un estadio para dos
Además, el estadio integraría museos, gimnasios, áreas para la presa, bares y zonas públicas para fomentar el tránsito, como espacios para eventos, etc.
En palabras del propio Boeri, los elementos más destacables son: la pista de atletismo ubicada en el nivel superior, que ofrece a todos los usuarios un lugar para caminar y entrenar, y la Torre de la Luz, un hito luminoso para los equipos milaneses.
“Con la Torre de la Luz, el objetivo es reforzar el modelo ‘Un estadio para dos’, enfatizando el rojo y el azul, los colores de los dos equipos que han llevado el fútbol milanés al mundo. Un hito luminoso que se reconoce de lejos y que cambia de color según el equipo en el campo, particularmente iridiscente con motivo del ‘derby della Madonnina’ (cuando se enfrentan el Inter y el Milan)”, comenta Boeri.
La torre albergará el museo de ambos clubes de fútbol y, en el vértice de sus torres, las estatuas de los futbolistas y entrenadores más remarcables de la historia futbolística milanesa.
Dentro del parque que rodearía al nuevo Estadio Forestal, con el objetivo de no olvidar la historia del actual Estadio Meazza, el proyecto prevé un memorial abierto permanentemente al público, donde se recogerán historias, leyendas, recuerdos y emociones de todo un siglo.
Con información de Idealista
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