La derecha salvadoreña, agrupada en la opositora Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), desmintió este lunes categóricamente que haya enviado "sicarios" a Venezuela para asesinar al presidente Nicolás Maduro, tal como él lo denunció en un mitin para la elección presidencial del próximo 14 de abril.
El principal señalado por Maduro, el diputado Roberto D’Aubuisson (hijo), apuntó: "No tengo nada que decir a personas que dan declaraciones falsas".
Y agregó: "Un tema así de serio no puede provenir de gente que tiene como fuente ‘un pajarito’.
Más temprano, el alto dirigente de ARENA, Donato Vaquerano, jefe de la bancada de dicho partido en el Parlamento, aseguró que las acusaciones contra D’Aubuisson son una "mentira" que pretende distraer la atención del avance que está logrando el candidato opositor Henrique Capriles frente al oficialista Nicolás Maduro.
"Nada tan fuera de la realidad… Nosotros somos un partido democrático", recalcó Donato Vaquerano.
"Han enviado unos sicarios para asesinarme", denunció Maduro, quien al igual que días antes lo denunciara el canciller venezolano Elías Jaua, detalló que en la confabulación estarían implicados presuntamente los ex funcionarios estadounidenses Roger Noriega y Otto Reich; en contubernio con miembros de la derecha salvadoreña, entre ellos el diputado Roberto D’Aubuisson (hijo) y el ex coronel David Koch Arana.
Según el gobierno venezolano, cuentan con información de inteligencia, fotos, grabaciones y documentos para demostrar tal "complot", que Otto Reich desmintió en un artículo publicado en "El País" de España.
Vaquerano agregó que es el gobierno de Venezuela el que interviene en El Salvador, con los proyectos del grupo ALBA, que financia rubros de combustibles, finanzas, alimentos, medicinas, entre otros, como ayuda al partido izquierdista y oficialista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).
El gobierno salvadoreño no ha emitido opinión sobre la álgida temática. /DPA