El presidente ruso, Vladimir Putin, realizó este lunes una visita a la ciudad holandesa de Ámsterdam ensombrecida por las protestas de varios miles de personas que se manifestaron contra las violaciones de los derechos humanos en Rusia y la ley contra los homosexuales prevista allí.
Putin rechazó las críticas. El presidente afirmó ante periodistas que las minorías sexuales no son perseguidas en Rusia. "Tienen los mismos derechos que los demás, hacen carrera y son distinguidos con órdenes estatales".
Por su parte, Putin describió la manifestación de mujeres semidesnudas con la que fue recibido en la ciudad alemana de Hannover como falta de gusto. "Estoy contento de que los homosexuales no se hayan sacado la ropa en Ámsterdam", dijo en referencia a las protestas en Holanda.
Unas 3.000 personas se manifestaron con música y pancartas delante del museo de Naval de Ámsterdam, en el que Putin cerró su visita con una cena con empresarios de los dos países.
"Putin go homo", era una de las consignas de los manifestantes, en un juego de palabras con "Go Home" ("Regresa a casa") pero que significa "Respeta a los homosexuales". En varios edificios públicos, como el ayuntamiento, se izó la bandera con los colores del arco iris, símbolo del movimiento por los derechos de los homosexuales.
Previamente, el presidente ruso inauguró oficialmente junto con la reina Beatriz el año Holanda-Rusia. /DPA