EFE
La canciller argentina, Susana Malcorra, afirmó hoy que tras la asunción del presidente Mauricio Macri el "renacer" de los vínculos bilaterales del país fue "explosivo", en una conferencia magistral donde repasó las claves del giro en las relaciones exteriores de este primer año de mandato.
Ante estudiantes de la Universidad Torcuato Di Tella de Buenos Aires, Malcorra explicó que el trabajo de la Cancillería ha sido mitad y mitad de corte político y económico, en busca de una "inserción en el mundo inteligente".
Tras algo más de una década de kirchnerismo en la que los lazos con el exterior resultaron "muy disminuidos", Malcorra defendió que hay que "desideologizar" las relaciones exteriores y dijo que, en respuesta, el interés del mundo fue "explosivo" y entusiasta.
"La gestión anterior tenía una visión del mundo alineada ideológicamente" y ello llevó a una "pérdida de oportunidades", porque implica relacionarse solo con los que "son iguales a uno", argumentó.
"Sobre todo en lo regional, la alineación ideológica no dio los resultados esperados, nosotros tratamos de jugar en toda la cancha", incidió.
No obstante también apuntó que los actores internacionales muestran cautela porque no ven garantías de continuidad a "largo plazo".
A punto de cumplirse un año de la asunción de Macri, Malcorra destacó que lograron volver a tener una relación "madura" con Estados Unidos, gran "ausente" en la política exterior del kirchnerismo, y sostuvo que sería más "cómodo" que las elecciones presidenciales de hoy las ganara la demócrata Hillary Clinton.
También mencionó su trabajo para profundizar los lazos con Europa, en especial en el marco del Mercosur con el impulso al pacto de libre comercio, y para potenciar otras relaciones estratégicas menos tradicionales, como con los países del Golfo, que representan una buena salida para los productos argentinos del área de la alimentación y la agricultura.
Respecto a China, importante aliado en la recta final del kirchnerismo (2003-2015), Malcorra comentó que relanzaron la relación y que encontraron un "interlocutor abierto al diálogo".
Ante varias preguntas del público, la soberanía del archipiélago atlántico de las Malvinas -bajo dominio británico- mereció un amplio capítulo de la exposición de la canciller.
Malcorra reconoció que es un tema muy "sensible" para los argentinos y reiteró el compromiso del Gobierno con la recuperación de las islas, tal y como recoge la Constitución, pero puntualizó que el vínculo con el Reino Unido también es "muy importante".
"Nos pareció que la cuestión de Malvinas no podía ser un impedimento para avanzar en una agenda propositiva", dijo.
Para ella, la situación no se va a resolver "de un día para otro" pero sí se pueden buscar "gestos" que ayuden a bajar barreras.
La canciller renovó el compromiso de Argentina con el proceso de paz en Colombia, "absolutamente necesario", y consideró que el presidente Juan Manuel Santos está haciendo "un esfuerzo" por "escuchar" y ampliar la base de apoyos y que las FARC parecen mostrarse "flexibles".
Asimismo, abogó por una salida negociada a la crisis política en Venezuela y se mostró satisfecha con el recientemente adquirido rol de observador de Argentina en la Alianza del Pacífico.
Por último, repasó otras cuestiones de agenda internacional, como la situación de Palestina -respecto a la que Argentina mantendrá la postura de defensa de los dos Estados- o la de Ucrania, que considera muy "tensa".
Malcorra ratificó también que Argentina continuará con su política de "puertas abiertas" frente a la crisis de los refugiados porque el país debe buena parte de su esencia a la inmigración.
Sin embargo, sí que deslizó que, en su opinión, podría ser beneficioso para el país ser "más proactivo" en el efecto llamado para algunas regiones y "más selectivo" con otros "perfiles" de inmigrantes, sin entrar en detalles.
2016-11-08