El Gobierno de Bolivia confirmó hoy que la Cancillería convocará a los embajadores de España, Francia e Italia y al cónsul de Portugal a dar explicaciones por el incidente sufrido el martes en Europa por el avión del presidente, Evo Morales.
La ministra boliviana de Comunicación, Amanda Dávila, declaró a Efe que Morales "está indignado" por el trato recibido del embajador español en Viena, Alberto Carnero, quien intentó subir a la aeronave para verificar si a bordo se encontraba el exanalista de la CIA Edward Snowden.
"Al principio había una confusión, pero (el jueves) el presidente (Morales) expresó su reclamo personal señalando que España lo trató mal a través del embajador en Viena", señaló la ministra.
Bolivia moviliza a más de un centenar de países en la ONU, incluidos los del Grupo de los 77 y el Movimiento de los No Alineados, para que condenen el trato dispensado por las naciones europeas a Morales, se indicó el viernes en la sede del organismo en Nueva York.
La confirmación de la convocatoria a los diplomáticos en La Paz incluye ahora al embajador español en Bolivia, Ángel Vázquez, que a principios de esta semana no fue mencionado por el Gobierno cuando anunció que pediría explicaciones a los países europeos que cerraron el tránsito aéreo al avión presidencial boliviano.
También serán llamados a dar explicaciones los representantes diplomáticos de Francia, Michel Pinard, y de Italia, Luigi de Chiara, y el cónsul de Portugal.
Esos países vetaron el sobrevuelo o aterrizaje del avión de Morales en su territorio ante la sospecha de que a bordo estuviera Snowden, reclamado por Estados Unidos por revelación de información clasificada.
La negativa provocó que la aeronave oficial tuviera que aterrizar de emergencia en Viena, donde Morales permaneció 13 horas a la espera de una nueva ruta de vuelo para volver a Bolivia desde Moscú, donde había participado en una cumbre de hidrocarburos.
Snowden permanece en la zona de tránsito del aeropuerto de Moscú desde hace dos semanas a la espera de lograr asilo político en alguno de los países a los que se lo ha solicitado.
WikiLeaks reveló esta semana que Bolivia es uno de los países a los que el estadounidense ha pedido asilo, aunque el Gobierno del país andino ha asegurado que no han recibido solicitud alguna.
La Paz prevé convocar la semana que viene a los embajadores y cónsul de los países implicados en el incidente, que aún no fueron llamados por una cuestión de tiempo.
La Cancillería boliviana se centró estos días en la organización de una reunión de varios presidentes suramericanos que se solidarizaron con Morales.
El líder boliviano recibió el jueves el respaldo de los presidentes de Argentina, Ecuador, Uruguay, Surinam y Venezuela en un encuentro en la ciudad de Cochabamba (centro) para condenar la actuación de Europa en este incidente.
La mandataria argentina Cristina Fernández, el ecuatoriano Rafael Correa, el uruguayo José Mujica, el surinamés Desiré Bouterse y el venezolano Nicolás Maduro exigieron que los cuatros países europeos se disculpen públicamente y expliquen su actuación.
Aunque el Gobierno español insiste en que nunca negó el sobrevuelo ni el aterrizaje al avión de Morales como sí hicieran expresamente Francia, Portugal e Italia, el presidente boliviano dijo que el embajador Carnero quiso subir personalmente a la aeronave en Viena para comprobar que no viajara Snowden allí.
Morales llegó a decir que se sintió tratado "como un delincuente" y que "los presidentes no mienten".
Según dijo el viernes en Madrid el ministro español de Exteriores, José Manuel García-Margallo, la actuación de los países europeos en este caso responde a que recibieron información -cuyo origen no ha precisado- de que Snowden estaba en el avión de Morales.
García-Margallo también sostuvo que España "no tiene que pedir ninguna disculpa a Bolivia", mientras un comunicado de su departamento manifestó su "sorpresa" a los seis países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) por las críticas contra su Gobierno.
"El Gobierno lamenta muy sinceramente que se haya producido un incidente de este tipo sobre el que reitera no tiene ninguna responsabilidad y desea manifestar su sorpresa por algunas declaraciones que emiten juicios de valor sobre su actuación, actuación, que siempre estuvo dirigida a la rápida y satisfactoria resolución del caso", aseguró el Ejecutivo español.
El portavoz del Ministerio francés de Exteriores, Philippe Lalliot, rehusó este viernes dar más explicaciones públicas sobre el incidente con Bolivia y subrayó que su voluntad es salir rápidamente de este asunto, que calificó de "desafortunado", para que los dos países trabajen juntos porque tienen "mucho en común".
Mientras, el vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, consideró que los países que negaron el tránsito a Morales se han convertido en colonia "infame" y "vulgar" de EE.UU. porque, según dijo, actuaron presionados por el Gobierno de Barack Obama. /EFE