El presidente Guillermo Lasso aseguró el martes que no habrá un nuevo confinamiento en Ecuador pese a que se registra una masiva oleada de contagios con la variante ómicron del coronavirus.
Destacó que una razón para no imponer esa medida en el país andino es por el alto nivel de vacunación impulsado por su gobierno.
"Estamos viendo los resultados; es una molestia contagiarse con la variante ómicron, pero es como una gripe fuerte. Porque mientras en el 2021 llegábamos a 43 fallecidos cada mil contagiados, hoy no se llega ni siquiera a uno. Estamos frente a una variante controlable que no lleva ni siquiera a saturar los hospitales”, dijo Lasso en una entrevista difundida desde el palacio de Gobierno.
Para reducir la oleada de contagios, el Comité de Operaciones de Emergencia redujo a niveles de 50 a 60% las actividades en restaurantes, salas de cine y prohibió todo tipo de concentraciones públicas o privadas. De hecho dispuso que el partido por las eliminatorias sudamericanas a Qatar entre Ecuador y Brasil, previsto para el 27 de enero, se juegue sin público. Mientras el acceso de centros comerciales únicamente es posible presentando el certificado de vacunación con dos dosis.
Con la nueva ola se dispararon los contagios desde unos 4.000, registrados en Navidad, hasta más de 42.000 en la segunda semana de enero. Mientras tanto, alrededor del 82% de la población mayor de cinco años ya recibió las dos dosis de la vacuna contra el COVID-19 y la tercera un 13% del total de la población. Desde mediados de febrero el gobierno espera vacunar a niños de tres a cinco años. Ecuador tiene 17,3 millones de habitantes.
NUEVO PEDIDO DE VACUNAS
Lasso señaló que su gobierno hizo un nuevo pedido de vacunas a China, adonde viajará en febrero, para inmunizar a ese grupo infantil. La mayor parte de las vacunas contra el COVID-19 utilizadas en Ecuador proceden del país asiático.
“No solamente tenemos que preocuparnos de que la salud física, biológica no sufra. También nos tenemos que preocupar de que la economía no sufra. Por la libertad que todos quieren sentir de salir a trabajar, mandar a sus hijos a estudiar, para que los jóvenes vayan a la universidad”, aseguró.
Laso consideró que el país tiene todo para lograr un crecimiento más grande del que logramos en el 2021, en el que la economía terminó creciendo el 4,1%. “Las expectativas de crecimiento cuando llegué al poder en mayo, eran de 2,5%. Ecuador tiene las posibilidades de apuntar a crecimientos aún mayores, tenemos petróleo, minerales, energía limpia”, entre otras ventajas para lograrlo, añadió.
El mandatario suscribió el martes un decreto para eliminar un impuesto a la salida de divisas que estaba en 4,75% para la importación de combustibles por parte de la empresa privada con el fin —según dijo, de que “los ecuatorianos sean los principales beneficiarios al recibir hidrocarburos de calidad"
AP
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