El gobierno japonés quiere apoyar a la gestora de la central nuclear de Fukushima Tepco en sus esfuerzos por controlar las fugas radiactivas, ante el aumento masivo de los niveles de radiación en la zona afectada por el devastador tsunami y terremoto de marzo de 2011.
Se espera que las medidas para combatir la filtración de agua contaminada sean presentadas durante una reunión ministerial presidida por el primer ministro, Shinzo Abe, mañana martes, según informó hoy un portavoz del gobierno en Tokio.
"Es una labor urgente", dijo el portavoz Yoshihide Suga. En caso necesario, el gobierno echará mano de fondos de reservas del presupuesto para este año.
Unas 300 toneladas de agua se filtraron de uno de los cientos de tanques levantados para contener el agua contaminada. En mediciones posteriores se comprobaron también niveles de radiación mucho más altos de los previstos hasta el momento.
Tras los hallazgos, crecen las dudas en el país sobre la capacidad de Tepco de solucionar el problema por sí solo.
En la noche del lunes al martes se apagará uno de los dos únicos reactores nucleares que siguen activos en Japón, para una inspección rutinarias. El reactor 3 de la central de Oi en la provincia de Fukui dejará de producir electricidad a partir de las 23:00 horas (local). El reactor 4 de la misma central se apagará el 15 de septiembre. Y entonces Japón volverá a estar, por segunda vez desde la catástrofe de 2011, sin producir energía nuclear.
No está claro cuándo se reactivar esos reactores. Pese a los problemas en Fukushima y el peligro de terremotos, el gobierno de Tokio quiere seguir generando energía nuclear. /DPA
Lunes, 02/09/2013