AP
El presidente de Francia, François Hollande, decidió abandonar un proyecto de ley que habría retirado la ciudadanía a terroristas condenados y endurecido el estado de emergencia en el país.
La propuesta para revocar la ciudadanía de terroristas condenados con doble nacionalidad había provocado una acalorada discusión política en el país, con la ultraderecha de acuerdo con la iniciativa, mientras que en la izquierda algunas voces expresaron su indignación por lo que calificaron de medida divisiva.
Quienes se opusieron argumentaban que crearía dos clases de ciudadanos — los que tienen dos nacionalidades y podrían perder la gala, y los que son sólo franceses, a quienes no se les aplicaría esta norma — en contra del principio de igualdad manifiesto en la constitución francesa.
En una inusual alocución a reporteros tras la reunión semanal de su gabinete ministerial, Hollande declaró que no tenía otra alternativa.
“La amenaza es más grave que nunca”, indicó Hollande y añadió que está decidido a “garantizar la seguridad de nuestro país y proteger al pueblo francés del terrorismo”.
2016-03-30