El presidente Barack Obama ha nominado a un ex directivo empresarial y funcionario gubernamental con experiencia en la administración de numerosas organizaciones en crisis para que se haga cargo de un Servicio de Rentas Internas (IRS, por sus siglas en inglés) muy criticado por su intimidación a grupos políticos.
En un comunicado obtenido por The Associated Press, Obama señaló que su candidato al cargo de comisionado de la agencia tributaria, John Koskinen, "es un experto en darle un giro total a instituciones con necesidad de reforma".
"Con décadas de experiencia, tanto en el sector privado como en el público, John sabe cómo liderar en tiempos difíciles, ya sea que eso signifique el seguimiento de nuevas gerencias o la implementación de nuevos controles y contrapesos", dijo Obama en el comunicado. "Cada parte de nuestro gobierno debe operar con absoluta integridad y eso resulta especialmente correcto para el IRS. Confío en que John hará lo que sea necesario para restaurar la confianza pública en la agencia".
Koskinen se hizo cargo de la reestructuración de Freddie Mac después de que la corporación de préstamos hipotecarios estuvo cerca del colapso durante la crisis financiera al final del gobierno del presidente George W. Bush. El experto de 73 años también ayudó a reestructurar los activos de la compañía de seguros de vida que sufrió el peor fracaso en la historia de Estados Unidos, Mutual Benefit Life, y reorganizó la Compañía de Transporte Penn Central luego que sufrió la peor bancarrota en Estados Unidos.
Su experiencia en el gobierno incluye el hacerse cargo de los preparativos para el desafío de 2000 para el presidente Bill Clinton y como ayudó a que el distrito federal recuperase la estabilidad financiera tras años de mala gestión como administrador municipal en 2000-2003.
La nominación de Koskinen a un periodo de cinco años aún debe ser confirmada por el Senado.
El IRS ha estado bajo asedio desde mayo cuando funcionarios de la agencia reconocieron que agentes que trabajaban en la oficina de Cincinnati habían sometido inadecuadamente a una mayor vigilancia a grupos del Tea Party que solicitaron un estatus de exención de impuestos. Desde entonces, el IRS ha presentado documentos que sugieren que grupos conservadores progresistas también podrían haber sido objeto de tales investigaciones. /AP