Redacción 2001.com.ve
Con más de 20 obras que dejaron un legado a la literatura urbana en Venezuela y en América Latina se recuerda este 13 de mayo a Salvador Garmendia, no por su nacimiento, sino por su lamentable muerte en Caracas hace ya quince años, en 2001.
Su pluma barquisimetana relató desde su existencia: la vida, los ambientes y la realidad aciompañada de diálogos a los personajes de diversas ciudades que plasmaron novelas, cuentos y crónicas.
Además de escritor fue narrador, periodista, guionista de radio y televisión y diplomático. Es considerado uno de los exponentes más grandes de la narrativa en el país.
A pesar que desde muy joven lo aquejó una tuberculosis, padeció de diabetes y de cáncer de garganta que la causara su muerte, fue un apasionado por la cultura desde sus inicios.
Su narrativa puede ser vista como una empresa de demolición de los anteriores esquemas de los escritores venezolanos.
Algunas obras significativas fueron: El Parque (1964), Los Pequeños Seres (1958), Los habitantes (1961), Días de cenizas (1963) y La mala vida (1968). También su primer libro de cuentos: Doble fondo (1965) y la monografía La novela en Venezuela (1967).
2016-05-13