En Venezuela, la escasez de autos nuevos hace que las listas de espera sean eternas y los de segunda mano, que sí hay disponibles de inmediato, tengan los precios por las nubes.
El taxista Daniel, por ejemplo, cambia de auto casi cada año y cada vez ve la situación más complicada: no consigue nada asequible en buenas condiciones.
Incluso las autoridades venezolanas consideran la situación insostenible.
Es por eso que tienen lista una ley de precios máximos para tratar de "normalizar" el mercado. /BBC MUNDO
Lunes, 30/09/2013