Equipos de emergencia enviados por Exxon Mobil intentaban el domingo contener unos 2.000 barriles de crudo derramados tras la ruptura de un oleoducto en Arkansas (sureste de Estados Unidos), anunció el grupo petrolero norteamericano.
La ruptura ocurrió el viernes de tarde en una sección del oleoducto Pegasus, cerca de la localidad de Mayflower, de unos 1.700 habitantes y situada al norte de Little Rock.
Según el juez del condado de Faulkner, Allen Dodson, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por su sigla en inglés) estimó el volumen de petróleo derramado en unos 2.000 barriles, pero por el momento la contaminación del lago Conway ha sido evitada.
"Lamentamos este episodio y pedimos disculpas por las perturbaciones e inconvenientes ocasionados", declaró en un comunicado Karen Tyrone, directora de operaciones de Exxon Mobil Pipelineen en el sur de Estados Unidos
"Estamos concentrados en la protección sanitaria y ambiental y en la seguridad", agregó. "Estaremos allí hasta que se termine la limpieza".
La EPA calificó el episodio como "derrame mayor", reconoció Exxon Mobile./AFP