Un exministro peruano del Interior y otras siete personas acusadas de pertenecer al paramilitar comando Rodrigo Franco comenzaron hoy a ser juzgadas en Lima por el secuestro y asesinato de cinco personas en 1988 y 1989.
El colegiado A de la Sala Penal Nacional dio inicio al proceso contra Agustín Mantilla, que fue ministro durante el primer mandato de Alan García como presidente de Perú (1985-1990), por el secuestro y desaparición en 1989 de los sindicalistas Saúl Cantoral y Consuelo García.
También se atribuye a Mantilla la responsabilidad en la ejecución extrajudicial de los militantes del Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) Luis Miguel Pasache y Sócrates Porta, y en la muerte del abogado Manuel Febres en 1988.
De acuerdo a la acusación del fiscal, Mantilla creó el comando Rodrigo Franco para realizar ejecuciones selectivas de opositores y presuntos terroristas y, por tanto, sería coautor del delito de lesa humanidad.
El fiscal Luis Landa declaró que "el comando fue un grupo paramilitar formado por militantes del Apra (partido de García) para enfrentar al terrorismo y a los políticos opositores".
En ese sentido, Landa remarcó que esos delitos no prescriben y reiteró el pedido de 25 años de prisión para Mantilla y sus coprocesados, además del pago de una reparación civil de 200.000 soles (77.000 dólares).
La defensa del ex ministro afirmó que el citado comando no existió y que el proceso debe ser calificado como uno por homicidio calificado.
Mantilla fue apartado del partido de García después de que se publicó en el 2000 un vídeo en que se le ve recibiendo un soborno de 30.000 dólares de Vladimiro Montesinos, que fue asesor de Alberto Fujimori cuando éste fue presidente de Perú (1990-2000), motivo por el cual fue condenado a seis años de cárcel.
A su turno, los abogados de los supuestos integrantes del grupo encubierto pidieron que se declare el caso prescrito, lo cual quedó a votación de la sala.
Se estima que los magistrados podrían citar al expresidente García como testigo en este caso. /EFE