DPA
La crisis disparó en España la economía sumergida hasta alcanzar la cuarta parte del PIB del país al cierre de 2012, según un estudio difundido hoy por los técnicos del Ministerio de Hacienda español.
El fraude fiscal se incrementó desde el inicio de la crisis, en 2008, y la economía en negro creció en 60.000 millones de euros desde entonces (82.000 millones de dólares), unos 10.000 al año.
Mueve en torno a 253.000 millones de euros, un 24,6 por ciento del PIB a finales de 2012.
Según los técnicos de Hacienda, este incremento se debe sobre todo al efecto "arrastre" provocado por la burbuja inmobiliaria que disparó la construcción en los años previos. También al "espectacular" crecimiento del desempleo (cuya tasa es del 26 por ciento), a las subidas de impuestos y al aumento de la corrupción.
"Los gobiernos miran para otro lado", dijo Carlos Cruzado, presidente de Gestha, el sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda. Hay una "clara falta de voluntad política para enfrentarse a este problema y luchar contra el fraude".
El porcentaje de economía sumergida en España duplica al de países como Alemania (13,1 por ciento), Francia (10 por ciento) o Reino Unido (10 por ciento). Los expertos apuntan a un "grave problema de moralidad" con el pago de impuestos que va más allá de los datos económicos.
2014-01-29