La policía de España desbarató una banda de tráfico de personas que forzaba a mujeres chinas a ejercer la prostitución en el país.
La pandilla prometía a las mujeres en China trabajos bien pagados en Europa, dijo el comisario Carlos Río-Miranda Iglesias el martes.
Cada mujer pagaba a la pandilla entre 8.000 y 10.000 euros (9.100-11.400 dólares). Pero tras llegar a España se les decía que estaban endeudadas con la pandilla, se las encerraba en apartamentos en condiciones antihigiénicas y se las forzaba a ejercer la prostitución las 24 horas del día, dijo Río-Miranda Iglesias en conferencia de prensa.
La pandilla les quitaba los pasaportes y drogaba a cualquiera que desobedeciera sus órdenes, añadió.
Los apartamentos se encontraban en Madrid y en las ciudades norteñas de Zaragoza y Bilbao.
La policía, tras recibir una denuncia anónima, arrestó a 63 personas, de las cuales 60 eran ciudadanas chinas, dos españolas y una paquistaní.
La presunta cabecilla en España era una mujer china, pero se cree que los verdaderos jefes de la banda están en China, según la policía.
AP
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