AFP
El bebé británico afectado de una rara enfermedad genética, Charlie Gard, cuyo caso conmocionó la opinión pública y fue objeto de una batalla legal, falleció este viernes, a unos días de su primer aniversario.
"Nuestro maravilloso chico se ha ido, estamos tan orgullosos de ti, Charlie" dijo Connie Yates, la madre del bebé, después de que los médicos le retiraran la asistencia respiratoria que lo mantenía en vida.
Gard, que iba a cumplir un año el 4 de agosto, sufría de una extraña enfermedad, el síndrome de depleción del ADN mitocondrial, lo que causa debilidad muscular progresiva en el corazón y otros órganos vitales, necesitando un aparato respirador al no poder realizar la función por sí mismo.
Durante cinco meses los padres del bebé libraron una larga batalla legal para que le permitieran sacar a su hijo del hospital británico en donde estaba internado y trasladarlo a Estados Unidos para recibir un tratamiento experimental, pero perdió sus apelaciones ante tribunales británicos y el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, en Estrasburgo.