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El diálogo auspiciado por el Vaticano entre el régimen bolivariano y la oposición podría conducir próximamente a la apertura del canal humanitario, y permitir que Venezuela reciba donaciones de alimentos y medicinas urgentemente necesitadas, pero las partes aún están en un punto muerto sobre el principal punto de la agenda: la separación de Nicolás Maduro del poder.
Según nota del diario El Nuevo Herald, diputados y dirigentes familiarizados con el diálogo dijeron que las partes siguen estancadas en el espinoso tema sobre la permanecía de Maduro en el poder y que el gobernante bolivariano sigue operando bajo la tesis de que él cumplirá el resto del actual período presidencial.
Es una postura que acentúa el riesgo de violencia, dada la creciente desesperación de la población ante el colapso de la economía del país sudamericano, reseña la noticia de Antonio María Delgado.
“Todavía no hay una clara señal sobre los seis puntos cardinales que se le planteo al gobierno, en las que debe ceder”, manifestó el diputado William Barrientos, quien forma parte de la representación opositora en la mesa de negociaciones.
“Ellos ofrecen realizar las elecciones de gobernadores en el segundo trimestre, las elecciones de que corresponde bajo la constitución realizarlas en diciembre. Nosotros estamos señalando que no, que deben realizarse este año”, sostuvo.
La oposición venezolana había fijado para el viernes la fecha tope para ver si seguía sentada en la mesa de diálogo y sus dirigentes tenía previsto reunirse esta noche para decir cuales serán sus próximos pasos.
Sobre el tema central, de permitir que la población se pronuncie este año sobre el gobierno a través de un referendo que revocaría el mandato de Maduro, el régimen no ha dado su brazo a torcer y ha pateado el tablero en la propuesta que previamente había colocado sobre la mesa de adelantar las elecciones presidenciales para el próximo año.
El Gobierno si ha dado indicios de que finalmente estaría dispuesto a permitir la apertura del “denominado canal humanitario” que permitiría el ingreso al país de donaciones de alimentos y de medicinas por parte de otras naciones.
Pero incluso esa nueva disposición del régimen se produce gracias a los buenos oficios del Vaticano. El régimen inicialmente había luchado en contra de esa moción porque aceptar la ayuda internacional también significa reconocer el grave desastre económico provocado por el chavismo en un país rico en petróleo.
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2016-11-12